UGT en Andalucía ha reconocido con los Premios 'Luchadoras' a cuatro mujeres delegadas de la organización, que se han distinguido por su defensa de la igualdad y los derechos de las trabajadoras. Los premios se entregan en el marco de la celebración del 8 de marzo.

Las mujeres premiadas son Gloria Dinora (Sevilla), María José Corrales (Granada), Francisca García (Cádiz y Leonor Moreno (Sevilla). 

Según ha informado UGT, estos galardones son un distintivo que el sindicato en Andalucía entrega desde el año 2015 a mujeres que por su trayectoria profesional o por su activismo sindical se signifiquen en la defensa de la igualdad y sean ejemplo en la lucha por los derechos de las mujeres trabajadoras. La entrega ha tenido lugar dentro del marco de la asamblea de delegados y delegadas que ha tenido lugar este martes 3 de marzo en la sede del sindicato en Granada, bajo el lema "Resistencia" y que ha contado con la presencia de la secretaria general de UGT-A, Carmen Castilla, y la delegada del Gobierno en Andalucía, Sandra García, además de otros representants del sindicato, como la secretaria de Igualdad y Juventud de UGT Andalucía, Cristina García, el secretario provincial, Juan Francisco Martín, la responsable provincial de Igualdad, Rosa Mª Muñoz, yla Vicerrectora de Igualdad, Inclusión y Sostenibilidad de la Universidad de Granada, Margarita Sánchez Romero.

Semblanza de las premiadas:

GLORIA DINORA ORDOÑEZ (Mención especial):

Dinora Ordónez Aguirre, se acercó a UGT Andalucía a través de un conocido afiliado tras sufrir un accidente in itinere y ser despedida por este motivo del trabajo como auxiliar de ayuda a domicilio que venía desempeñando desde hacía unos meses.

Con un despido verbal, sin trabajo, indemnización y sin saber qué hacer, fue atendida a través del Servicio de Defensa Legal de la Mujer de UGT Andalucía, logrando que se le abonaran los salarios pendientes y la indemnización por despido correspondiente mediante un acuerdo prejudicial.

Nació en Ecuador, y desde hace 20 años reside en España, con nacionalidad española. En esa época emigró de su país, dejando 2 niños pequeños, de 6 y 7 años al cuidado de sus padres maternos.

Tuvo que irse huyendo de su expareja, ya que no respetaba la orden de alejamiento que tenía por violencia de género, sufriendo amenazas y vejaciones constantes por su parte, incluso llegó a robarle en un negocio de restauración que ella regentaba, como venganza al solicitar el divorcio y orden de alejamiento.

Cuando llegó a España se instaló en Benidorm y durante 13 años trabajó en esta ciudad en diferentes trabajos, desde administrativa hasta ayudante de cocina, siendo el que más tiempo dedicó el de camarera de buffet en hoteles.

En 2010 logra traer a su hija a España después de muchas gestiones y en 2013, se traslada a Andalucía, concretamente a Marbella, debido a los estudios de su hija, al concederle realizar las prácticas de los estudios que realizada de Asesoría de Imagen y Comunicación e Idiomas, en la Escuela de modelos “Manuel Beltrán” de esta ciudad.

También en 2013, logra traer a su hijo, después de mucho esfuerzo y trabajo. Pero desgraciadamente al poco tiempo pierde a su hija de forma inesperada, y a pesar de este duro revés que la vida le da, ella sigue trabajando incansablemente, y decide trasladarse a Sevilla para seguir apoyando a su otro hijo, que tiene discapacidad.

 Hoy vive en Sevilla y sigue luchando cada día por seguir adelante y por las especiales circunstancias que vive su hijo.

FRANCISCA GARCÍA MONCAYO

Francisca García Moncayo nació en Bornos el 28 de julio de 1957, Auxiliar de Clínica comenzó a trabajar a los 17 años en el Hospital de Frontela, en el Hospital Santa María del Puerto durante un año, después Trabajó en el Hospital San Juan Grande hasta su Prejubilación el pasado año.

Con 19 años formó parte de la Asociación de vecinos de su barrio “La Jerezana” en el Olivar de Rivero. Fue la primera mujer que formó parte de esta asociación. Estuvo hasta los 23 años intentando que las mujeres se vieran implicadas en los problemas de su barrio y ayudarles a descubrir que es posible trabajar hombres y mujeres juntas. El papel de la mujer en aquella época estaba relegado a tareas domésticas, cuidado de la casa y de los hijos, por lo que no se veía bien que una mujer se reuniera y preocupara de otros aspectos fuera de la casa.

Afiliada a UGT desde el 1980, sobre el año 1982 organizó con otras compañeras, de forma clandestina, el comité de empresa del Hospital "con muchas dificultades y represalias de la empresa". Estos fueron sus inicios en el campo sindical. Desde entonces ha sido presidenta del Comité de Empresa del Hospital San Juan Grande al frente de las distintas luchas, reivindicaciones, negociaciones de los convenios colectivos, despidos, encierros, concentraciones. Siempre fuerte, convencida de la importancia de la lucha sindical por los derechos de las/as trabajadores/as, consiguió muchos logros en el sector de la sanidad privada-concertada de la provincia de Cádiz, y gracias a su esfuerzo y de otras compañeras, se redujo las desigualdades entre hombres y mujeres en los convenios colectivos de su empresa.

Ha estado siempre vinculada a la comarca de Jerez, implicada y representando a la UGT, en defensa de los derechos de las mujeres, organizando y participando en muchos actos especialmente en los 8 de Marzo junto con la marea violeta. Actualmente pertenece a la ejecutiva comarcal de la FeSP  y representa a la Unión Comarcal de UGT Jerez en el Consejo Local de la Mujer del Ayuntamiento de Jerez.

En todos los ámbitos de su vida laboral, sindical y personal, ha trabajado para que las mujeres sean libres e iguales, y entre todas destruir los obstáculos que impedían y siguen impidiendo luchar por los derechos e igualdad de las mujeres.

Otro campo de acción que ha marcado mucho su vida es el trabajo como cooperante desde la ONG, “Otro Mundo es Posible”, que participa en proyectos de cooperación con el tercer mundo, en países de Centroamérica, en El Salvador y Honduras donde las mujeres y niños son los que padecen mayor pobreza y miseria.

LEONOR MORENO GONZALEZ

Leonor Moreno Gonzalez nació 1973, en Sevilla. Se incorporó al mundo laboral siendo muy joven, cuando terminó sus estudios de la EGB y sólo le ofrecieron trabajos precarios. Con 17 años comprobó muy de cerca el rechazo que muchas empresas muestran a la contratación o mantenimiento del puesto de trabajo de mujeres jóvenes, en edad fértil o que tengan o se pueda intuir la intención de tener hijos a corto plazo, ya que la despidieron por quedarse embarazada de la cooperativa de costura en la que estaba trabajando.

Fue la primera mujer en Morón en aprender la poda del olivo.

En el 2002 se incorpora a la empresa PROCAVI, empresa líder europea en la producción de aves. Se afilia y en 2003 se presenta a las primeras elecciones que se realizan tras su ingreso, donde es elegida presidenta del Comité, cargo que ha ostentado durante 12 años ininterrumpidos. En la actualidad es miembro de éste.

Ser sindicalista es a veces "un camino lleno de obstáculo, pero con esfuerzo, lucha y firmeza y con el apoyo de sus compañeros y compañeras, ha liderado tres huelgas en su empresa donde las reivindicaciones laborales han salido adelante", y actualmente está participando en la mesa negociadora del convenio colectivo sectorial de “Mataderos de Aves y Conejos”.