Agentes de la Policía Nacional han detenido a una persona de 38 años, nacida en la República Checa como presunto responsable de ocasionar daños en el perímetro de alambrado metálico de la Alhambra. Además, se les considera responsable de un delito de resistencia y desobediencia, y se le ha incoado una posible sanción por una pistola de aire comprimido que tenía entre sus pertenencias. El individuo acumula tres detenciones previas de la Policía Nacional y ya ha sido puesto a disposición de la autoridad judicial.

Según relata la Policía en una nota, cerca de la medianoche agentes de la Policía Nacional recibieron una llamada a través del 091 en la que vigilantes de seguridad del Patronato de la Alhambra informaban de que tenían retenida a una persona que había roto una valla y había accedido al interior de una zona restringida. Estaba recorriendo las instalaciones a bordo de un patinete fuera del horario de apertura al público. Al llegar la patrulla policial, encontraron un individuo muy agresivo que no paraba de insultar y amenazar a los vigilantes. Esta persona no solo se negó a identificarse sino que, además, intentó agredir a los agentes, que tuvieron que emplear la fuerza mínima necesaria para poder reducirla.

La patrulla en servicio pudo comprobar cómo la alambrada metálica por la zona de la Silla del Moro presentaba un hueco de aproximadamente 1 metro cuadrado por el que había accedido este individuo junto con el patinete. A simple vista, no apreciaron en el recinto del Generalife ningún daño más aparte de la valla fracturada.

Al realizar durante la detención el cacheo de seguridad correspondiente, los agentes encontraron en la mochila del detenido una pistola negra de aire comprimido de calibre 4.5mm, teniendo que proceder a su incautación para su posterior propuesta de sanción. Posteriormente, además, pudieron comprobar que este individuo había tenido sanciones previas de privación del derecho a la tenencia y porte de armas.