•  "Yo me equivoqué, metí la pata", ha admitido, señalando que se comportó como un "deportista" en la celebración, cuando debería "haber estado en un papel más institucional"

El expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) Luis Rubiales ha insistido en que la futbolista Jennifer Hermoso le dio su consentimiento para besarla durante la celebración del Mundial. Ese beso fue, según Rubiales, "como dar un abrazo" y "totalmente espontáneo". 

Así lo ha declarado durante su declaración como acusado en el juicio que se sigue en la Audiencia Nacional por los delitos de agresión sexual y coacciones a la futbolista. Se enfrenta a una petición de dos años y seis meses de cárcel. 

Rubiales ha restado importancia a lo sucedido, negando que su intención fuera "satisfacer su deseo sexual" y apuntando que en otras celebraciones se "comía a besos a un montón de futbolistas". 

Y, a preguntas de la fiscal, ha respondido que está "totalmente seguro" de que obtuvo el consentimiento de la jugadora para el beso. 

Ha admitido que se equivocó, por adoptar una actitud más de deportista en una celebración que la correspondiente al papel institucional como presidente de la Federación de Fútbol. "Yo me equivoqué, porque yo estoy en una posición como presidente de la Real Federación Española de Fútbol, y metí la pata", ha asegurado para precisar que se comportó "como un deportista que consigue un éxito como uno más del grupo, y en ese momento tenía que haber tenido la sangre más fría y haber estado en un papel más institucional, pero de ahí a que haya un delito, como usted dice, eso para nada", le ha dicho a la fiscal.

También ha trasladado el matiz de que no era superior jerárquico de las jugadoras. "No son trabajadoras, vienen convocadas y en ese periodo su jefe deportivo es el seleccionador".