El CEIP Eugenia de Montijo comenzó su andadura en 1972, y desde ese momento ha sido receptor de familias residentes en el barrio de La Chana. Si en sus orígenes atrajo al alumnado de familias de clase trabajadora procedentes de la inmigración interior que se produjo a partir de los años 60 del siglo pasado, actualmente también es receptor de alumnado de familias inmigrantes de otros países y con una situación socioeconómica diversa.

A esta circunstancia se une que el ccolegio cuenta con un elevado número de niños y niñas con diversidad funcional. Sobre un total de 236 alumnos y alumnas, 67 presentan esta diversidad, integrados en aulas ordinarias. También hay alumnado en Aula TEA especializada en alumnado con Transtorno del Espectro Autista más un Aula específica de educación especial. Por tanto, el 29% del alumnado del centro cuenta con alguna diversidad funcional.

En atención a estas especiales características, y en colaboración con el equipo directivo y profesorado del centro, la AMPA 1º de Mayo ha realizado un esfuerzo de planificación y ejecución de proyectos dentro de la Obra Social La Caixa.

Favorecer la integración en el patio

El objetivo del proyecto de este curso 2024/2025, centrado en la revitalización del patio, persigue favorecer la integración y sentar las bases de una escuela inclusiva como forma de avanzar hacia una sociedad también más inclusiva. El patio inclusivo se impregna del modelo que se lleva a acabo en el aula: El Diseño Universal de Aprendizaje (DUA). Un modelo teórico-práctico con potencial suficiente como para contribuir a lograr el Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS4) de la Agenda 2030. Favorecer el diseño de un patio inclusivo contiene elementos primordiales para el desarrollo social, kinésico e igualitario.

Según la presidenta del AMPA, Laura Camprubí, “este proyecto es una clara apuesta por diferenciarnos del patio tradicional que se caracteriza por espacios monopalizados por la pelota, con escasos espacios en sombra ahora que debemos afrontar el cambio climático y pocas zonas para el juego grupal donde prima el cemento. En este sentido, apostamos por contribuir a un escenario espacial donde se favorezca la inclusión y la interacciones igualitarias. Pero la interacción necesita espacios de sombra suficientes”.

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Muro de ilustraciones y árboles plantados en el patio del centro. Fotos: AMPA

Es por todo ello que se ha actuado en dos zonas. Por un lado el patio de infantil, donde además de la adquisición de material interactivo e inclusivo, se ha forjado un espacio de sombra con la plantación de 7 árboles con el fin de evitar el traslado de alumnado, especialmente de aquel que presenta diversidad funcional, ante el aumento de temperaturas en los meses de mayo y junio, y septiembre y octubre fundamentalmente. Por otro lado, en el patio de primaria se ha completado la estructura de madera que se financió con la ayuda del año anterior con instrumental manipulativo y temática espacial, plantando 6 nuevos árboles para generar a su alrededor un espacio de sombra que ya se ha convertido en uno de los lugares más dinámicos y de mayor interacción dentro de ese patio.

Otros proyectos anteriores

Camprubí ha destacado la fructífera relación de la Obra Social La Caixa con la AMPA 1º de Mayo del CEIP Eugenia de Montijo, ya que en el curso 2022-2023 se subvencionó el proyecto “Competencia emocional a través del teatro” para favorecer sinergias educativas en “nuestra comunidad diversa social, étnica y funcionalmente”. En el curso 2023-2024 el proyecto perseguía un colegio “multisensorial y accesible” con el acondicionamiento y dotación de material que estimulara todos los sentido, así como una sirena musical que supuso la instalación de un sistema informático para mitigar alteraciones de conducta entre el alumnado con diversidad funcional favoreciendo una relación más positiva en el centro escolar.

“Ciertamente -concluye, Camprubí- han sido tres años de intenso trabajo por parte de nuestra AMPA, porque siempre intenta realizar un trabajo lo más colaborativo posible, especialmente con el profesorado, y no nos queda más que agradecer a la Obra Social La Caixa su tarea en pro de una sociedad más justa e igualitaria para todas y todos, especialmente, como en nuestro caso, para el conjunto del alumnado y aquellas niñas y niños que tienen diversidad funcional y que contribuye a que el resto de nuestras hijas e hijos se vean estimulados por una educación más inclusiva”.