Pocos bares como Ruido Rosa, en el número 18 de la calle Sol, perpendicular de Pedro Antonio de Alarcón. Templo de la música alternativa de Granada durante casi cuatro décadas, de la auténtica movida de la ciudad, esa que se gestó a finales de los ochenta, que la leyenda engrandeció con grupos y artistas que marcaron un nuevo rumbo y que sigue abierta, dando el apellido a la ciudad como ciudad del rock y del pop.

Como sus propietarios han anunciado en un emotivo mensaje en Instagran, cierra a finales de este mes. 

Como sus propietarios han anunciado en un emotivo mensaje en Instagran, cierra a finales de este mes. 

“Creemos que es el momento oportuno de confirmar lo que ya es un secreto a voces: a finales de Junio, Ruido Rosa, tu Ruido Rosa, cerrará sus puertas.

En los últimos años, estas cuatro desvencijadas paredes han presenciado un viaje mágico, inexplicable y maravilloso: la creación de un sentimiento de amistad y comunidad que no ha entendido de género, raza, nacionalidad ni generaciones.

Hemos tenido la inmensa suerte de conocer y compartir momentos inolvidables con gente increíble que siempre nos ha apoyado y aportado un amor y un cariño imposible de explicar con palabras.

No hay espacio suficiente para enumerar a toda la gente que ha trabajado, pinchado, colaborado, bailado, sudado y disfrutado en esta vuestra casa.

"Nos despedimos con una enorme sonrisa. Ya nos pondremos melodramáticos cuando anunciemos el día de la despedida"

Nos despedimos con una enorme sonrisa. Ya nos pondremos melodramáticos cuando anunciemos el día de la despedida.

Tan sólo, darte un millón de gracias a ti, que has sido protagonista.

Nos despedimos con una enorme sonrisa. Ya nos pondremos melodramáticos cuando anunciemos el día de la despedida.

De momento, os invitamos a disfrutar y a darlo todos estos últimos fines de semana que nos quedan”, señalaban en su despedida, sin fecha en un mensaje que concluía con:

Estrofa de la canción de The End de The Beatles (1969), que recuerda: “Y al final el amor que recibes es igual al amor que das”

“And in the end

The love you take

Is equal to the love you make”

Estrofa de la canción de The End de The Beatles (1969), que recuerda: “Y al final ell amor que recibes es igual al amor que das”.

Abierto en noviembre de 1987 por integrantes de 091 y Paco Ramírez, el gran manager, que lo fue también de Enrique Morente, por El Ruido han pasado generaciones para disfrutar de la cara más exquisita y alternativa de Granada, que su clientela conformaba para escuchar músicas difíciles de que sonaran en otros garitos. Junto a ellos, cualquier miembro de bandas o solistas, y no solo de Granada, también foráneos que aprovechaba su paso por la ciudad para conocerlo o repetir, mucho antes de que abrieran otros bares que quisieron imitarlo.

Muchos grupos estrenaban en el local sus nuevos discos y composiciones y hasta maquetas de bandas, luego, consolidadas

Por su barra, ejercieron de camareros también algunos artistas, como Noni, el líder de Lori Meyers, Natalia Muñoz, la cantante de Dolorosa, o Víctor Lapido, encargado y copropietario del bar en la penúltima etapa junto a su hermano, José Ignacio, que se enfrentaron al cierre por sanciones por ruido en 2017.

Desde aquel año, Sergio Vela, su último dueño, renovó el local, programó más actuaciones en la sala, y abrió El Ruido a nuevas músicas, pero siempre tratando mantener la máxima de que en todas las canciones que se pinchaban no faltaran las guitarras.

El anuncio ha provocado un aluvión de reacciones, donde se junta el cariño, la admiración, el agradecimiento y la rabia.

Los responsables del local han aclarado que la decisión no está relacionada con la entrada en vigor la nueva normativa sobre ruidos y lo achacan a motivos exclusivamente personales.

[Nota de la redacción: la noticia se ha actualizado con la precisión de los responsables del local desvinculado el cierre de la nueva normativa de ruidos.]