El circuito del folk y la música tradicional no suele dar muchos titulares en los medios, es más, apenas algunos breves o ni eso. Por eso la albaceteña Carmen Toledo permanecía en el ángulo muerto hasta que participó en el Benidorm Fest, donde otras ‘folclóricas’ como Blancapaloma o las pandereteiras Tanxugueiras también han obtenido buenos réditos publicitarios. Sin embargo, en el caso de Karmento, acumulaba ya un decenio largo de trabajo, algo perfectamente perceptible en su dominio de las tablas, incluso en las de La Tertulia, que sin microfonía son particularmente sacrificadas.

La manchega decoró el escenario con ajuares populares, desde mantones, platos y canastos a jarras y canicas de cristal, como si estuviera en su casa del pueblo alrededor del brasero de picón. Solo que el calor lo puso ella. Sin más acompañamiento que la intensa y esforzada guitarra de Emilio Abengoza, la suya y su destreza con las castañuelas, sacó sus mejores dotes, no solo de emocional cantante, sino también de comunicadora, reivindicativa, peleona, y con mucha doblez humorística.

Corren razonables buenos tiempos para el ‘neofolclore’, que una serie de pujantes artistas jóvenes están elaborando a partir de la tradición: seguidillas, jotas y fandangos en su caso, filtrados por el atrevimiento sonoro y el descaro en sus tratamientos; no solo sin perder el respeto al legado, sino acentuándolo, en el concepto más que en la mezcla. Elementos tan primorosos en su lectura como ¿punk? por momentos en su exposición briosa. Y más cuando en ausencia de máyores tejidos sonoros, su fuerza natural brotó a borbotones.

Comenzó a capella, en reverencial silencio del personal, con la amorosa  ‘El aguadero’, abriendo el estreno aquí de su segundo disco ‘La serrana’, donde aparecen otras canciones como ‘la Cuentas’, ‘Fangos’, ‘Me dio Pelusa’ o ‘Danzar sobre la tierra’… O la eurovisiva “Quiero y duelo, en una sesión en la que tan importante fue lo cantado como lo contado, personal, confidente, y propiciando la complicidad. Como que estaba de salud a medio gas y que no sabía si podría terminar el concierto, según dijo. Lo terminó. Y volverá, seguro, no se la pierdan. ‘It's Only Folk (But I Like It).