El Consorcio de Transporte pone en servicio su primer autobús con biodiésel
El Consorcio de Transporte Metropolitano del Área de Granada ha puesto en marcha, de la mano de Repsol, la primera prueba de demostración de biodiésel en un autobús de la empresa Alsa. La consejera de Fomento, Articulación del Territorio y Vivienda, Rocío Díaz, ha asistido a este primer trayecto en la línea que conecta Granada con Atarfe. Durante cuatro meses, este autobús recorrerá, utilizando biodiésel, 350 kilómetros al día entre los dos municipios granadinos.
Rocío Díaz ha agradecido el esfuerzo de Repsol y Alsa por “este primer paso que nos ayudará en el propósito del Gobierno andaluz de reducir los niveles de contaminación de Granada y su área metropolitana”. “Es una iniciativa pionera que sitúa a Granada y a nuestra área metropolitana como referente en la apuesta por un transporte público más sostenible”, ha manifestado la consejera, que ha señalado que, con esta primera prueba, se estima que se evitará la emisión de 2,02 kg de CO2 por litro consumido, según sus cálculos, aunque el biodiésel sigue emitiendo contaminantes a la atmósfera en su combustión.
Autobúses eléctricos e híbridos en 2024
La consejera también ha expuesto que este proyecto se suma a otras líneas de trabajo que la Consejería de Fomento está desarrollando, como “la incorporación a nuestra flota de vehículos que contaminen menos”. Así, ha adelantado que en 2024 está prevista la incorporación de cuatro autobuses híbridos, eléctricos y de combustión a la flota del Consorcio. “Avanzamos hacia una movilidad más sostenible a la par que aumentamos el número de viajeros en transporte público”, ha añadido. Sobre esto último, ha destacado el buen momento que atraviesa el Consorcio de Transporte, que en octubre consiguió superar por vez primera los dos millones de viajeros en un mes.
La puesta en marcha de este autobús "con combustibles 100% renovables" forma parte del protocolo de colaboración que suscribieron en marzo el Consorcio de Transporte y Repsol y se enmarca en la Revolución Verde del Gobierno andaluz, que a medio plazo confía en extender al resto de consorcios metropolitanos andaluces para contribuir al uso de vehículos más eficientes y que consuman energía más limpia.
Sobre esta prueba piloto con combustibles 100% reciclables también ha intervenido el director de Alsa de la Zona Mediterránea, Valeriano Díaz, que ha señalado que su empresa “está comprometida con aquellas acciones que sirvan para la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero y por ello hemos querido ser los primeros en poner a disposición del Consorcio uno de nuestros vehículos para esta prueba ya que el impacto medioambiental es una variable fundamental”.
Mientras, Estíbaliz Pombo, subdirectora de Productos Energéticos de Repsol, ha añadido que “la nueva prueba de suministro demuestra nuestra apuesta por los combustibles renovables, uno de los principales ejes para llegar a ser una compañía cero emisiones netas en el 2050. Los combustibles renovables son ya una solución que reducen de manera inmediata las emisiones del transporte y son compatibles con la flota actual e infraestructuras de distribución y repostaje existentes”.
Con esta iniciativa, los autobuses del Consorcio de Transporte Metropolitano del Área de Granada servirán de banco de pruebas para promover el empleo de soluciones sostenibles. Para suministrar el producto, Repsol ha instalado un tanque de 2.000 litros de combustible renovable en las instalaciones de Alsa.
Emisiones que se compensan
Los combustibles denominados renovables son los que se producen a partir de materias primas renovables. Sus promotores lo consideran "cero emisiones netas", pues el CO2 que emiten se compensa, según sus cifras, con el CO2 retirado previamente por la masa vegetal que se utiliza en su fabricación. De esta forma, pretenden garantizar una contribución efectiva a la lucha contra el cambio climático.
Concretamente, los biocombustibles avanzados se fabrican a partir de residuos orgánicos como aceites vegetales usados, residuos agrícolas y forestales que no se destinan a la alimentación, por lo que fomentan la economía circular. Este combustible "es una solución para todos los segmentos de la movilidad, desde aviones, barcos, camiones, autobuses o coches sin necesidad de hacer modificaciones en el motor ni en las infraestructuras de distribución y de repostaje ya existentes", dice la Junta, aunque se trata de un combustible más caro que el procedente del petróleo.
Para descarbonizar la movilidad, la fórmula escogida por Repsol ha sido un modelo energético que combina la electrificación, los combustibles renovables y el hidrógeno. "Todas las soluciones energéticas deben tomarse en cuenta para garantizar el suministro y reducir las emisiones de la forma más rápida y eficiente posible", afirma. Repsol fabrica y comercializa biocombustibles desde hace más de dos décadas, y desde 2019, incorpora residuos orgánicos en su fabricación. Los combustibles renovables ya están presentes en todas las estaciones de servicio en España en un contenido de más de 10% de los combustibles que se venden.
En 2025, Repsol afirma que tendrá una capacidad de producción de 1,3 millones de toneladas de combustibles renovables y llegará a más de dos millones de toneladas en 2030, lo que le posicionará como una empresa líder en la producción de estos combustibles en España y en Europa.
Además de la consejera y los representantes de Repsol y Alsa, han asistido también el alcalde de Maracena, Julio Pérez, el delegado del Gobierno de la Junta en Granada, Antonio Granados; y el delegado territorial de Fomento en Granada, Antonio Ayllón; y el director gerente del Consorcio de Transporte Metropolitano del Área de Granada, César Díaz.