La marea amarilla pide un compromiso claro con el soterramiento del nuevo gobierno
Este miércoles se reunieron a las puertas del Ayuntamiento. No solo habían citado a los grupos municipales, también a sindicatos, asociaciones vecinales, de defensa de la Vega, del Comercio, los integrantes de la plataforma de afectados por el AVE en Loja, además de instituciones como la Universidad o la Diputación, entre otros.
Pero solo Vamos Granada e Izquierda Unida decidieron sumarse a la convocatoria. El resto de grupos -fundamentalmente PSOE y Ciudadanos- consideró, según José Fernández Ocaña, presidente de la asociación de vecinos de La Chana y portavoz de la marea amarilla, que en la víspera de la investidura "no era el momento".
Visiblemente enfadado, se preguntó si detrás de esa decisión habría alguna intención de recular. Espera que no, al considerar necesario parar "la aberración urbanística" que quieren hacer.
Según explicó Javier Alonso, portavoz de la plataforma Salvemos la Vega, el objetivo del compromiso que tienen redactado para que una vez más se sumen los grupos municipales y representantes de la sociedad granadina es que Granada sea, para 2031, la fecha en la que aspira a ser capital cultural y que coincide además con el 500 aniversario de la Universidad, "una ciudad habitable".
Entre sus exigencias inmediatas:
- Restablecer el tráfico ferroviario con carácter "urgente", tras un año de desconexión, adoptando para ello la opción que implique "el menor coste económico".
- La licitación de la Variante Sur de Loja "tal y como estaba proyectado y aprobado".
- Abordar entretanto el soterramiento de las vías de AVE y del tren convencional a su entrada en Granada, recuperando este espacio para la ciudad y sus habitantes.
- Estaciones acordes con el potencial turístico y económico de la ciudad, tanto en la Avenida de Andaluces de la capital como en Loja.
- Y establecer una comisión mixta de seguimiento y transparencia de la obra.
Consideró imprescindible que la ciudad "no se divida", porque "los ciudadanos no lo estamos y queremos -dijo- una Granada que proyecte una imagen de unidad de cara al futuro". Por ello insistió en que seguirán luchando para tratar de "convencer a quien haya que convencer" de que es necesario "parar el muro de la vergüenza".
Durante el acto a las puertas del Ayuntamiento, otros portavoces vecinales, como el del Parque de la Rosaleda, reclamó la paralización de las obras de la Alta Velocidad.