El presidente del TSJA apela a no "poner permanentemente en duda" por parte de políticos el "correcto proceder" de los jueces
Lorenzo del Río, en una imagen de archivo. rocío ruz/EP
El presidente del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), Lorenzo del Río, ha indicado este lunes que "no es bueno, y mucho menos por parte de responsables políticos, poner permanentemente en duda" el "correcto proceder" en lo que es "el funcionamiento normal" de la judicatura y ha apelado así a respetar "entre todos" la independencia de los jueces.
Estas declaraciones a los medios, en el marco de un encuentro con los medios de comunicación con motivo de la Navidad, llegan después de que el pasado viernes la presidenta del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y del Tribunal Supremo, Isabel Perelló, emitiera un comunicado en el que rechazó que se atribuyan "sesgos políticos" a los jueces, después de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, dijera que el PP juega con las cartas marcadas porque cuenta con la ayuda de algunos jueces.
"No podemos poner siempre en tela de juicio" la independencia de los jueces, a los que Del Río ha explicado que pide también "lealtad" y "moderación institucional".
"Son mensajes que calan en los ciudadanos" y no traen "nada positivo", advierte el presidente del TSJA
No es bueno poner en su opinión "siempre en tela de juicio" si los jueces "no actúan sino por intereses ajenos a lo que es la estricta aplicación del derecho", ha indicado el presidente del TSJA que ha lamentado que "son mensajes que calan en los ciudadanos" y no traen "nada positivo". La ciudadanía, ha agregado, "necesita creer en la Justicia".
Se ha congratulado de que 2024 haya dejado atrás "afortunadamente" la "crisis institucional del CGPJ", que "ahora tiene una larga tarea a lo largo del próximo año de tantísimos nombramientos pendientes" y para "también romper con esa imagen de polarización".
Igualmente el presidente del TSJA ha señalado que 2025 puede venir condicionado por la aprobación del proyecto de Ley Orgánica de medidas en materia de eficiencia del Servicio Público de Justicia, que puede suponer "un antes y un después" en el funcionamiento del día a día de los juzgados.
"Tiene importantísimas reformas procesales, tecnológicas y de nueva organización judicial" en tanto "supondría cambiar el concepto" y la organización de los partidos judiciales.
"Al mismo tiempo, va aparejada también de unas medidas procesales potentes, tanto tecnológicas como de reducción y simplificación de procedimientos, de acumulación de procesos" y entre otras cuestiones, de "medios complementarios de administración de justicia".
"Se introduce lo que llamamos la mediación intrajudicial, las fórmulas de consenso previos a cualquier tipo de demanda", con lo que Del Río ha hecho una "lectura positiva" si bien habría apostado por que el legislador hubiera sido "más valiente" en el camino de una unificación entre partidos judiciales "sin pérdida de identidad".
En lo que respecta a Granada, ha resaltado la operación para la unificación de sedes judiciales, en alusión a la compra de El Cubo.