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Ecologistas en Acción concede cuatro Banderas Negras a playas de Granada con graves daños medioambientales

Ciudadanía - IndeGranada - Sábado, 29 de Junio de 2019
El colectivo también señala siete Puntos Negros en otras zonas del litoral de la provincia.
Residuos en una playa de Albuñol.
ecologistas en acción
Residuos en una playa de Albuñol.

Ecologistas en Acción ha otorgado sus Banderas y Puntos Negros a distintas zonas de la costa granadina, una iniciativa nacida en 1999 para denunciar "aquellas playas o tramos de litoral que sufren vertidos contaminantes, agresiones urbanísticas o cualquier otra actuación que ocasione una pérdida de calidad ambiental del litoral".

Los objetivos de las Banderas Negras son, según explica el colectivo:

  • Dar una información rigurosa a todos los usuarios de las playas del estado real en que se encuentran éstas. 
  • Requerir a los ayuntamientos y resto de las Administraciones para que contribuyan al saneamiento de las playas y pongan fin a la degradación ambiental del litoral.

Las dos calificaciones negativas otorgadas son:

  • Bandera Negra: impactos de mayor gravedad (vertidos contaminantes, basuras, agresiones urbanísticas y artificialidad de las playas). 
  • Punto Negro: impactos significativos, pero de menor gravedad. 

Este es el informe completo de las Banderas y Puntos Negros 2019 de Ecologistas en Acción:

Banderas Negras 2019 en el litoral de Granada

En Granada todo sigue casi igual. Poco ha cambiado la cosa desde el anterior informe del año 2018. Cuatro son las playas merecedoras de Bandera Negra en la costa granadina:

1.- Playa del Peñón y de la Guardia (Salobreña). 

2.- Playa Granada (Motril).

3.- Playa de las Azucenas (Motril).

4.- Playas de Albuñol (Albuñol y la Rábita).

1ª.- Playa del Peñón y la Guardia (Salobreña).

La urbanización de la playa, llamada TH-1 en la jerga urbanística, ya ha terminado con las huertas de toda la vida y ha urbanizado la zona. La construcción de los prometidos cuatro hoteles de lujo todavía se hace esperar (y lo que imaginamos que habrá que esperar) aunque, eso sí, en un año electoral como éste, los regidores municipales se hacen la foto con los promotores, asegurando que antes de que acabe el año – como siempre - empezará la construcción.

Por lo pronto ahí queda la zona con sus carreteras y farolas y los charcos que se forman cada vez que llueve al proyectarse sobre una zona inundable.

La vega de Salobreña, ya urbanizada. Todas las fotos del informe: Ecologistas en Acción

2ª.- Playa Granada (Motril).

Todos los inviernos los temporales (uno o varios) se llevan la arena y, como siempre, la administración pública (o sea, todos nosotros) gastamos cientos de miles de euros en llevarles arena para mantener los negocios de la zona, hasta que vuelva otro temporal y vuelta a empezar.

Como agradecimiento de los negocios hacia la ciudadanía que les paga los arreglos, cortan la servidumbre de paso, a pesar de los expedientes sancionadores que, según dice la administración, se han incoado y cuyos efectos no se ven.

Servidumbre de tránsito ocupada.

Privatización de la servidumbre de tránsito.

"Paso" por la servidumbre de tránsito.

3ª.- Playa de las Azucenas (Motril). 

Sigue recibiendo vertidos de aguas residuales por la Rambla de los Álamos, que usan los responsables de la depuradora como aliviadero cuando les viene bien. Además los temporales van descubriendo las toneladas de escombros y basuras que estaban camufladas bajo la arena.

Vertidos de guas residuales a la Rambla de los Álamos que las lleva a la playa de las Azucenas.

Escombros y basuras aparecen en la playa de las azucenas.

4ª.- Playa del Pozuelo (Albuñol).

Ha finalizado la actuación de costas para recuperar el dominio público marítimo terrestre ocupado sin autorización por invernaderos.

A pesar de ello,la zona sigue siendo un vertedero, por los propios residuos que permanecen tras la eliminación de los invernaderos y por los vertidos agrícolas que arrastran las lluvias hasta la playa.

Rastro tras los invernaderos.

Estado habitual de las playas de Albuñol.

Puntos Negros 2019

1º.- Municipio de Almuñécar Playa de Cantarriján

En la playa de Cantarriján (Almuñécar), a la que hay que acceder en transporte público o andando durante la temporada estival, se ha proyectado la construcción de un aparcamiento, estando pendiente de autorización administrativa.

Consiste la implantación de un acceso controlado al aparcamiento de propiedad privada por la empresa, con un coste equivalente al de otros aparcamientos públicos del municipio.

Serán 168 plazas de aparcamiento en zona próxima al mar. Los beneficios que calculan son de 117.734 € a un precio de 80 céntimos la hora.

La construcción de este aparcamiento entra en contradicción con las actuaciones de la Junta de Andalucía que desde el año 2008 puso en marcha, durante los meses de verano, el servicio de transporte de acceso a la playa de Cantarriján desde la CN-340 con el fin de proteger el paraje de la masificación y los vehículos

Playa de Cantarriján.

Playa de Cabria

Se han construido nuevos edificios de viviendas y apartamentos y hay más en proyecto. Se acabó el encanto de la playa de Cabria.

Barranco y playa de Cabria en 2016.

Barranco y playa de Cabria en 2018.

Barranco y Playa de Cabria en la actualidad.

2º.- Municipio de Salobreña.

Jaulas piscifactoría: Después de desaparecer los restos de las antiguas jaulas, en las nuevas ya no se observa actividad y todas estas instalaciones continúan siendo un peligro para la navegación. Parte de los restos de las antiguas están abandonados, hechas pedazos, en la playa de la Guardia.

Las jaulas se encuentran sobre zona protegida (ZEC Zona de Especial Conservación, antes LIC) de la Caleta al Tesorillo y deberían haberse retirado cumpliendo con la normativa del espacio natural.

Una de las dos jaulas que hay actualmente.

Monte Almendros y todas las otras urbanizaciones de las laderas (Costa Aguilera, El Pargo, Alfamar, etc…).:

A pesar de las múltiples denuncias por vertidos, el Ayuntamiento no soluciona el problema de la urbanización de Monte Almendros, a pesar de que cobra a los propietarios impuestos como zona urbana, pero no disponen de servicio de evacuación de aguas residuales, que cada vecino soluciona a su manera: vertiendo directamente a los barrancos que bajan hasta el mar, hasta la zona protegida ZEC de la Caleta al Tesorillo.

A pesar de todo, el Ayuntamiento sigue dando nuevas licencias de construcción sin que haya alcantarillado, como obliga la ley.

Tubería de desagüe directamente al barranco.

Playa de la Cagaílla:

Igual de regresiva que Playa Granada, con la que limita, pero que no regeneran porque todavía no están los seis hoteles previstos en el plan TH-2. Aún así, los promotores han presentado un megaproyecto con espigones en el mar, nuevos muros y hacer el cauce del río Guadalfeo 4 veces más ancho, para que se pueda urbanizar el TH2 y de paso se lo paguemos entre todos.

En el proyecto proponen también eliminar el puente final del Guadalfeo (que ahora molesta) por ser incompatible con la avenida de 500 años y el aparcamiento de barcas provisional, junto a la desembocadura.

Zona de la Cagaílla (ya no hay playa) comida por el mar, uno de los efectos negativos más palpables de la influencia de la Presa de Rules sobre las playas próximas, ya que al retener los sedimentos que antes llegaban al mar, está provocando la regresión de la línea de costa.

Desembocadura del Guadalfeo. Zona inundable donde tienen previsto la construcción de seis hoteles de lujo según la planificación urbanística (TH-2).

3º.- Municipio de Motril

Playa de Poniente (Motril): Los desagües de vertidos, industriales sobre todo, siguen llegando por balates (acequias) a la rambla de las Brujas que vierte en plena playa. No se sabe de intervenciones de las administraciones responsables para solucionar este problema de años.

Desagüe de vertidos en la rambla de las Brujas.

Cada vez que hay un temporal se inunda la playa y los charcos se ven favorecidos por las extracciones de arena que periódicamente se realizan para llevarla a otras playas.

Playa de Poniente inundada, como cada vez que hay temporal.

Costa oriental: Desde Motril hasta Almería, los invernaderos siguen asfixiando las playas y llenado de plásticos y residuos toda la zona, llegando a culminar en las playas de la Rábita, famosas en el mundo entero por sus residuos.

Los invernaderos caen sobre toda la costa.

A veces llegan hasta la misma orilla del mar. 

Y nos dejan este panorama. 

Pesca ilegal

Y como todos los años decimos que sigue siendo un problema sin solucionar las actividades pesqueras de arrastre, muy cerca de la costa, y la recogida furtiva a pequeña escala de especies protegidas, como la ortiguilla de mar.

En lo que va del año 2019 la guardia civil ha decomisado cinco trasmallos ilegales en la costa.

Arrastrero faenando demasiado cerca de la orilla.

Realimentación de playas

Mal llamada regeneración, porque devolver una playa a su estado natural no es echar arena, sino evitar todas las acciones que la han hecho perder su estado primitivo, por lo que sigue siendo un problema. Aparte del dispendio económico que supone cada año tras los temporales (a veces en varias ocasiones por temporada) el efecto positivo no se ve.

Las intenciones anunciadas de poner espigones no son válidas porque ya se conoce con certeza el efecto negativo de los mismos en las playas vecinas, al interferir con las corrientes marinas que son las que distribuyen las arenas.

Es necesario tomar conciencia de que la única solución para nuestra costa es aceptar la evidencia de la regresión, a causa de la falta de aportes fluviales y con ayuda del cambio climático, y retranquear todas nuestras actuaciones a una distancia prudencial de la orilla, que permita una viabilidad futura de las actividades y dé una seguridad a las personas. Todo lo demás es rompernos la cabeza contra un muro y que, además, nos sale muy caro.

Banderas Azules "sin credibilidad"

Según Ecologistas en Acción, los galardones concedidos por la Federación Europea de Educación Ambiental, conocidos como Banderas Azules, en cambio, "carecen de cualquier credibilidad, se basan en meros aspectos turísticos, no realizan inspección alguna y no evalúan con rigor el estado medioambiental de las playas". 

“Los premios de Bandera Azul solo indican la existencia de servicios para los bañistas, no deben exhibirse como ecoetiquetas, sino como distintivos de calidad de servicios ofrecidos a los bañistas en playas artificiales y urbanas”, opina el colectivo. En Granada en 2019 tienen Bandera Azul Playa Granada, Torrenueva y Calahonda. 

"Y si todavía no teníamos bastante con los falsos galardones de Banderas Azules, Ecovidrio amenaza con otro distintivo, el de Banderas Verdes, aliado con el gremio de los chiringuitos costeros, unos de los culpables de la degradación y ocupación de muchas playas", estima Ecologistas en Acción.

Según explica Ecologistas en Acción, la Consejería de Salud realiza periódicamente un análisis para evaluar la calidad de las aguas de baño de las playas andaluzas. Ninguna playa granadina está fuera de la norma. En las muestras de agua se determinan los diferentes parámetros exigidos por la normativa vigente, como los microbiológicos, transparencia, color, aceites minerales, presencia de espumas persistentes y sólidos flotantes, restos orgánicos y cualquier otro residuo de cristal, plástico, caucho, madera, que pueda afectar a la salubridad de las aguas y se considere de interés sanitario. 

Pero para Ecologistas en Acción, esta analítica "es insuficiente y debería incorporar la detección periódica al menos de hidrocarburos, metales pesados y restos de fitosanitarios, con una incidencia evidente en la salud de la población afectada. También la Consejería debería evaluar la incidencia de los desechos que acoge la arena de las playas, con evidente incidencia en la salud de los usuarios (aunque no se bañen)". 

Apesar de que los datos analíticos oficiales sobre la calidad de los vertidos de las depuradoras (cinco actualmente) están dentro de la norma, y la calidad del agua es “excelente” "no quiere decir que no nos encontremos sorpresas en el agua cuando nos bañamos.

Como reconoce la Agencia Europea de Medio Ambiente sobre la calidad de las aguas de baño: “La contaminación fecal de las aguas sigue constituyendo un riesgo para la salud humana, en especial si está presente en las zonas de baño. Nadar en playas o lagos contaminados puede provocar enfermedades. Las principales fuentes de contaminación son las aguas residuales y las aguas drenadas de las tierras y las explotaciones agrícolas. Esta contaminación se incrementa cuando se producen precipitaciones intensas e inundaciones, debido al desbordamiento de las alcantarillas y al vertido de aguas de drenaje contaminadas en ríos y mares”. 

También es hora de abordar, estima el colectivo, el estudio de cómo los micro y nanoplásticos están influyendo en el medio hídrico, en sus organismos y en la población que se baña en aquel y se alimenta de éstos, para poder aplicar medidas para su erradicación, un aspecto que ya están abordando algunos grupos de investigación de la Universidad de Granada. 

Ecologistas en Acción pide también a la ciudadanía y al conjunto de los visitantes de nuestros espacios costeros que tenga una actitud responsable en el uso de los recursos que nos brinda nuestro privilegiado medio natural. Retirar las basuras a los contenedores más cercanos, respetar la vegetación y los pasos peatonales recomendados, no utilizar vehículos destructores en espacios tan frágiles,... en definitiva, procurar dejar inalterados los espacios que hemos utilizado es algo fundamental para usos futuros.