La plataforma ciudadana Granada En Marcha hace balance de estos dos años subrayando que "se cumplen dos años sin trenes por decisión política y Granada debe saberlo". "La ciudadanía ha demostrado en estos meses que la línea Granada-Moreda-Baeza/Linares está operativa, pero Fomento insiste en su decisión de no permitir salir trenes por esa línea. Transformando el gasto diario en autobuses cercano a los ocho mil euros en inversión en esa línea los horarios serían competitivos para Granada y para Almería", lamenta el colectivo. 

"Su incompetencia a la hora de evaluar la situación real y una temeridad que sólo se comprende por su menosprecio a Granada les llevó a cortar la línea Granada. Bobadilla para acelerar la llegada del Ave “low cost”. Unos meses dijeron… tras dos años ni trenes convencionales ni AVE ni Ave “low cost”. Estamos claramente ante una política de Estado que nos aboca al fin del ferrocarril convencional en nuestra tierra envuelto en una promesa de AVE que no llega", expone en un comunicado al cumplirse los dos años de aislamiento ferroviario. 

Ante esta situación y "comprobada la incompetencia del Estado en materia ferroviaria en lo referente a la provincia de Granada y por extensión a todo el levante Andaluz Granada", En Marcha ve como "única salida" que la Junta de Andalucía "asuma su responsabilidad y solicite, previos los preceptivos informes, asumir la gestión de todas aquellas líneas férreas que discurren íntegramente por territorio andaluz, como así prevé el art. 64 del Estatuto de Autonomía y en desarrollo a la ley de 9/2006 de Servicios Ferroviarios de Andalucía y, en sentido contrario, la propia Constitución Española, que reserva la competencia exclusiva del Estado a los ferrocarriles que transcurran por territorio de más de una Comunidad Autónoma en su art. 149.1.21ª".

Al amparo de lo previsto en sus respectivos Estatutos, en 1978 y en 1982, la Generalitat de Cataluña y posteriormente el Gobierno Vasco, hicieron lo propio con las líneas de tren que cumplían los requisitos aludidos, dando lugar a Ferrocarrils de la Generalitat y Euskotren, "auténticas herramientas vertebradoras en ambos territorios", recuerda Granada En Marcha. "Y lo llevaron a cabo sobre la base de su competencia exclusiva en transportes, como ocurre en Andalucía, con independencia de la titularidad de la infraestructura sobre la que se desarrolle".

Granada en Marcha solicita a todos los grupo del Parlamento andaluz que "articulen las medidas necesarias para que, por una vez, la Junta de Andalucía deje de ver pasar el final del tren convencional en nuestra tierra y haga un uso pleno de las posibilidades que proporciona nuestro autogobierno y las Leyes, y se tome en serio la vertebración de Andalucía por ferrocarril".