Los colectivos integrados en la Marea Amarilla han exigido responsabilidades por los 21 meses de aislamiento ferroviario a consecuencia de la interrupción del tráfico en la línea Granada-Bobadilla para ejecutar las obras del AVE.

Según ha denunciado la Marea, tras los encuentro que ha mantenido con profesionales del tren y agentes económicos y sociales, ha constatado que "no era necesario interrumpir el tráfico de trenes", y por ello exige conocer quién tomó esa decisión y los criterios que se siguieron para justificar una medida que "ha condenado" a Granada. 

A través de un comunicado, la Marea Amarilla lanza las siguientes preguntas:

• ¿Quién o quienes decretaron el corte del tráfico ferroviario? 
• ¿Quién o quienes autorizaron esta paralización y qué criterios se siguieron para justificar una medida de esta envergadura?
• ¿Quién o quienes van a asumir la responsabilidad política de estas "erróneas decisiones"? 

Y, tras recordar los 5,2 millones de euros "tirados en autobuses mientras los trenes duermen en el depósito" y los fondos "desperdiciados" en los tramos adaptados a doble vía "que ya no se utilizarán", exige conocer: 

• ¿Cuales son los perjucios sociales y ecónomicos derivados de esta "irresponsabilidad"?
• ¿ Fueron valorados en su momento?
• ¿Quién o quienes se harán responsables del "inmenso perjuicio social y las astronómicas pérdidas económicas" que ha sufrido durante estos 21 meses nuestra tierra? 

A juicio de la Marea Amarilla, la ciudadanía granadina tiene "derecho a saber" y pide al nuevo subdelegado del Gobierno, Francisco Fuentes, que aclare estas cuestiones, " ya que la máxima autoridad de Fomento ha vuelto a imcumplir su palabra". 

"Mientras tanto, en Granada, -lamenta la Marea Amarilla- continúa el despilfarro junto al muro de la vergüenza". 

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Muro del AVE en la capital. marea amarilla