El Ayuntamiento de Granada ha abordado la mejora de las instalaciones del colegio de Educación Infantil y Primaria (CEIP) Gallego Burín, situado en la calle Colegio de Veterinarios, junto al río Monachil, en el Zaidín, donde durante este curso escolar se han llevado a cabo 42 actuaciones, entre las que destaca la mejora de la accesibilidad al centro educativo, con la apertura de una nueva puerta de acceso, a la vez que se han acometido medidas para convertirlo en un entorno escolar seguro.

En visita al centro educativo, los concejales de Mantenimiento, Medio Ambiente y Educación, Jacobo Calvo, y de Movilidad y Protección Ciudadana, Raquel Ruz, han destacado que, con esta intervención, el gobierno municipal atiende una “demanda histórica” de la comunidad educativa de este centro público, con la que “damos respuesta a una petición justa, realizada hace dos años y que hasta ahora no había tenido respuestas”, ha lamentado, para a continuación explicar que, entre otras medidas, se ha abierto una nueva puerta de entrada y salida al colegio más segura para los escolares.

Con una inversión de más de 2.000 euros, Jacobo Calvo ha indicado que, además, se han acondiiconado las áreas verdes del centro, “acordes”, según sus palabras, “al proyecto medioambiental que desde la comunidad educativa se está llevando a cabo en el colegio”.

Hitos y bolardos

Estas medidas se han visto complementadas con otras impulsadas desde el área de Movilidad para implantar en la ciudad entornos escolares seguros. En este caso, tal y como ha explicado Raquel Ruz, además de instalar nueva señalización tanto horizontal como vertical sobre la existencia de un colegio en la zona, se ha establecido una limitación de velocidad y se han instalado hitos y bolardos en las dos calles peatonales de las inmediaciones para evitar el acceso y estacionamiento de vehículos en la zona.

Raquel Ruz, concejala de Movilidad y Protección Ciudadana, dice que la implantación de entornos escolares seguros en los colegios permite “a los alumnos y alumnas desplazarse con total seguridad, hacerlo a pie, mejorando así la movilidad de la ciudad, sino también la seguridad de nuestros escolares”.

"Estamos en contacto con los centros escolares, dentro del plan de entornos escolares seguros, que nos ha llevado a peatonalizar algunas calles en horario de salida y acceso escolar, el refuerzo de la señalización y la implantación de la figura de reguladores escolares, que son niños y niñas que dirigen y ayudan a otros escolares a circular con seguridad en los entornos educativos”, ha dicho.

Tras informar de que el Ayuntamiento de Granada ha atendido solo en el mes de diciembre 200 actuaciones relacionadas con el mantenimiento, conservación y mejora de los equipamientos escolares,  ha indicado que para el equipo de gobierno local “la eduación pública es una prioridad” por lo que ha avanzado que "vamos a trabajar por dignificar los equipamientos y vamos a apoyar todos los proyectos educativos que permitan a estos 38 colegios a tener una oferta educativa atractiva, de tal manera que se convierta en un reclamo para que puedan seguir manteniendo el servicio de educación pública en la ciudad”, ha dicho.

Jacobo Calvo, quien ha agradecido la labor del profesorado, del que ha resaltado “la prestación de un servicio absolutamente seguro, pese a la situación de pandemia en la que nos encontramos”, ha solicitado a la Junta de Andalucía que muestre su compromiso para que “desde el esfuerzo colectivo que  todas las administraciones debemos tener con la educación pública en las materias de nuestra competencia” aborde la solicitud realizada por la comunidad educativa del colegio Gallego Burín en torno a la mejora y arreglo de sus actuales pistas polideportivas del centro.