Espectacular concierto sin tregua de casi tres horas
La sublime creación de Lagartija Nick
Una crónica distinta del espectacular concierto que ofreció anoche en la Sala El Tren Lagartija Nick, para presentar su último trabajo: 'Crimen, Sabotaje y Creación', un disco portentoso.
P.V.M.
Lagartija Nick, en un momento de la actuación.
Si acaso todo está perdido ahora que el siglo XXI ya es mayor de edad y con el tiempo, nada es lo que era, nos queda Lagartija Nick para sacudirnos con brutal honestidad y recordarnos que la música, cuando es Arte, moviliza conciencias y entrañas.
No hay grupo con 28 años de vida ya que ofrezca semejante bagaje sonoro. Capaces de mantener el incendio, ya sea explorando desde el trash al flamenco -y de qué formas-, para el que guste etiquetar, los lagartija, solo, como los muy grandes, son en su esencia actitud y Arte. Creación sublime.
Antonio Arias, magistral, como el resto de la banda. P.V.M.
Todo eso y más, mucho más, -porque con Lagartija Nick siempre hay mucho más que indagar sobre el escenario-, convirtieron su último directo en una generosa experiencia casi mística de casi tres horas, ante un público entregado desde que sonaron los acordes del estremecedor Adagio Súbito y se abrieron las cortinas.
Allí, la formación original; magistrales. Antonio Arias, como maestro de ceremonias, junto a Eric Jiménez, Juan Cordoniu, MAR Pareja y JJ Machuca, novedad a los teclados, para orbitar canciones incombustibles.
Impecable sonido. No hay tregua. Y todas y cada una de las canciones te alcanzan como compañeras de tu particular banda sonora de casi tres décadas, a las que suman las de ‘Crimen, Sabotaje y Creación’, uno de los mejores discos de año, que perdurará en el tiempo, y que concentró la primera parte de una memorable actuación.
José María Carrillo encara 'La leyenda de los hermanos Quero'. P.V.M.
Momentos estelares, como cuando aparece José María Carrillo, compositor, letrista, poeta y fundador de Gente del pueblo, aquel grupo que con sevillanas denunciaba las injusticias sociales al final del franquismo, para encarar La leyenda de los hermanos Quero. Vínculos estrechos en las tablas entre generaciones de luchadores y agitadores sociales para una canción que pasa a la historia.
Ya no hay vuelta atrás. Elegancia radical para recordar a genios como Enrique Morente, con Vuelta de paseo y los desgarradores versos de Lorca: ‘Asesinados por el cielo’; y a Jesús Arias, tan presente en todo el último disco, y a Joe Strummer. Y del homenaje perenne a su hermano, estreno de dos canciones del EP El testamento del sol, con canciones que Jesús comenzó a componer para Strummer: Hymno y Lorca-Strummer.
Sabotaje, en la recta final con esos hits inmortales (Inercia, Hypnosis..), seguir con Val del Omar, con David Fernández, en la batería, y concluir con Exilio/Adagio Súbito, después de casi treinta canciones.
En las primeras filas, alguien lloraba.
No, no todo está perdido. Siempre quedará Lagartija Nick para demostralo.
Si quieres volver a leer nuestra crítica del último disco de Lagartija Nick o no has tenido la ocasión aún, puede hacerlo:
