El Biodomo refuerza la aspiración de Granada de ser la capital de la Innovación y la Ciencia
Ideado hace más de veinte años en los albores de la construcción del exitoso Parque de las Ciencias, el museo del Sur más visitado, pero incluido en su última fase, el Biodomo nace como una “ventana a la vida”, construido para ser destinado a la educación ambiental, la conservación de especies y la investigación científica.
Solo existen en el mundo cuatro espacios similares al que este lunes inauguró la presidente de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, que dedicó elogios al nuevo recinto y al Parque de las Ciencias, al que calificó como “una fábrica de sueños”, un “atractivo turístico y cultural”, pero sobre todo como “un modelo de éxito”, que exporta Granada y Andalucía.
Las autoridades al inicio de la visita. Miguel Rodríguez
21 años después de su apertura, con más de 9 millones de visitas –unas 600.000 anuales-, el Parque de las Ciencias ha logrado que el 43 por ciento de los fondos que gestiona procedan de inversiones exteriores, recalcó la presidenta de la Junta quien mencionó el amplio respaldo social y el consenso político que el museo interactivo ha construido en este tiempo.
En la misma línea se pronunció previamente el alcalde de Granada, el socialista Francisco Cuenca, quien destacó la “calidad” y “excelencia” del Parque de las Ciencias, convertida por méritos propios en una “marca de prestigio” para que la Granada sea la capital de la Innovación, la Ciencia y la Cultura, en la que trabaja el Ayuntamiento.
Un recorrido subacuático, con dos grandes acuarios, de ecosistemas tanto marinos como de agua dulce, donde se encuentran tiburones cebra o de puntas negras, rayas reticuladas o morenas leopardo, entre los cientos de peces tropicales que nos permiten acercarnos a los fondos de regiones como Sulawesi. Junto a ellos, varios acuarios de detalle completan la muestra de la variedad de especies, y donde se pueden ver medusas de lunares blancos, peces payaso, estrellas de espinas rojas o camarones boxeadores entre muchas otras especies.
En el recorrido terrestre el visitante podrá pasear por la recreación de un manglar, entre otros hábitats donde se encuentran especies de mamíferos como lémures de cola anillada, wallabys de cuello rojo, perezosos de dos dedos o el armadillo de seis bandas, junto a nutrias de uñas cortas, caimanes de China o varanos acuáticos.
También insectos como la cucaracha gigante de Madagascar y anfibios como la tortuga Mata-Mata o la rana cornuda son ejemplos de la enorme biodiversidad de la zona. El camino del visitante asciende hasta el recorrido aéreo donde se podrán observar especies de aves como el tucán de pecho blanco, el mielero patirrojo o el trompetero.
En el recorrido se pueden contemplar en el hábitat acuático, terrestre y aéreo, desde tiburones grises o peces payaso, hasta nutrias, tucanes o lemures de cola anillada, pequeñas arañas venenosas o los majestuosos baobab de Madagascar. Un ualabí de cuello rojo o los perezosos aferrados a un tronco o anfibios como la tortuga "Mata-Mata", que conviven con ranas cornudas, anfibios, mariposas y caimanes.
Susana Díaz y Francisco Cuenca, en un momento del recorrido por el Biodomo. miguel rodríguez
Esta iniciativa del Parque de las Ciencias girará sobre los ejes de la educación, la conservación y la investigación e intercala en el recorrido subacuático y terrestre laboratorios con profesionales de diferentes ámbitos dedicados a velar por las especies del Biodomo y a la investigación, junto a bioterios transparentes para que el público vea cómo se prepara la comida o la limpieza de los animales.
El director del Parque de las Ciencias, Ernesto Páramo, subrayó que los animales que habitan el Biodomo lo hacen cumpliendo los máximos requisitos establecidos en ambientes recreados para que vivan con normalidad. El Biodomo será un lugar para ayudar a la conservación de la biodiversidad, así como una herramienta al servicio de la comunidad científica para desarrollar proyectos de investigación. Su puesta en marcha tendrá un impacto positivo con la creación de 20 puestos de trabajo directos, más los indirectos asociados a su funcionamiento, y constituye además un nuevo recurso para la oferta de ocio cultural en Andalucía, que vendrá a reforzar la propuesta turística de la región contribuyendo a generar riqueza y desarrollo económico en su entorno.
La inauguración del Biodomo ha llevado además a colectivos animalistas y ecologistas a protestar durante su apertura. Un grupo de varias decenas de personas se ha concentrado a la entrada del museo, para protestar por la "confinamiento" de los animales en lo que consideran un zoo, que además servirá para enseñar a los niños que "es aceptable exhibir y privarles de libertad".
Critican que el Biodomo, una mezcla de zoológico, acuario y botánico, albergará "cientos de animales" que vivirán encerrados y "expuestos" a las miradas de los visitantes, "sufriendo daño físico y psicológico". "Incluso bajo las mejores condiciones es imposible duplicar el verdadero hábitat natural de estos animales", han indicado los animalistas, quienes han rechazado este tipo de espacios "artificiales".
Además, se ha opuesto al nuevo espacio Vamos Granada, quien se hizo eco del planteamiento de Equo Granada. Sin embargo, el concejal de la formación vinculada a Podemos, Luis de Haro-Rossi, se desmarcó de estas críticas en las redes sociales.
Además, permitirá desarrollar proyectos de conservación en lugares amenazados y colaborar en redes internacionales que investigan con animales en peligro de extinción. Algunos ya han comenzado, como el proyecto con comunidades locales que se desarrolla en Madagascar para proteger manglares y el hábitat de los lemures, junto a uno destinado a la cría y reintroducción de tortugas autóctonas en Nepal.
Una de las especies del Biodomo. miguel rodríguez
El nuevo pabellón se abrió en una fase de adaptación para que las especies, que proceden de centros, se acomoden a su hábitat y el museo ha estimado que la fase de madurez del proyecto se alcanzará dentro de dos o tres años, por lo que la apertura al público estará ahora adaptada a las necesidades de los animales.
El Biodomo conecta temáticamente con otras infraestructuras del Parque de las Ciencias como son el Mariposario Tropical, las Rapaces en Vuelo, el Centro Andaluz de Medio Ambiente, los Recorridos Botánicos, la Sala Biosfera o el Pabellón Darwin.
La entrada al Biodomo tendrá un suplemento de 4 euros respecto a la entrada general del museo, aunque también podrá adquirirse la entrada de forma independiente para esta instalación, para una visita siempre en torno a una hora de duración. De igual modo la visita está condicionada a la aceptación de una serie de normas por parte de los visitantes, como la prohibición de acceder con alimentos o el uso de cámaras con flash, a fin de no alterar el bienestar de los animales.