La diversidad de flora y fauna en el Valle del Darro, el valor de sus yacimientos arqueológicos y el hecho de ser un "pulmón para Granada", una ciudad con altos niveles de contaminación, son razones más que suficientes para proteger este singular enclave. Así lo ha trasladado la rectora de la Universidad de Granada (UGR), Pilar Aranda, que ha liderado la movilización institucional para reclamar a la Junta de Andalucía que reactive la protección como Bien de Interés Cultural de este entorno, y no espere, como pretende la Consejería de Cultura y Patrimonio Histórico, tres años para hacerlo.

Como ha informado El Independiente de Granada, la UGR, los centros del CSIC que tienen su sede en la ciudad y la Real Academia de Bellas Artes se han dirigido al presidente de la Junta, Juan Manuel Moreno, para reclamarle que se reactive ese expediente, que fue anulado por sentencia del TSJA el pasado año. Lo hacen para frenar cualquier "amenaza de especulación urbanística" que trate de aprovechar este resquicio. 

La rectora ha liderado este movimiento para garantizar la máxima protección para el Valle del Darro tras anularse su BIC

A preguntas de los periodistas, la rectora, que ha liderado este importante movimiento en defensa del patrimonio granadino, ha sido contundente: "Es un Valle que hay que proteger claramente. Tiene una diversidad de flora y fauna excepcional, yacimientos arqueológicos extraordinarios, supone un pulmón para Granada y, en el momento en el que estamos, viendo la contaminación que tiene esta ciudad, evidentemente la Universidad va a estar ahí". 

Aranda ha explicado que se puso en contacto, para trasladarle la iniciativa, con la presidenta del CSIC, Rosa Menéndez, que autorizó a los directores de los centros a firmar, en un paso que también ha respaldado la Real Academia de Bellas Artes. 

La Junta de Andalucía, como avanzó este diario, quiere esperar tres años antes de activar este expediente. Argumenta que así lo exige la Ley de Patrimonio de Andalucía, que obliga a una espera de tres años cuando el expediente BIC ha caducado. Esa interpretación es cuestionada por algunos juristas. De hecho, estas instituciones que se han dirigido al presidente de la Junta no comparten esa interpretación y recuerdan que la nulidad no puede equipararse con caducidad. 

Mantenga la Junta o no esa interpretación, el movimiento de estas tres instituciones le obliga a reactivar el BIC. Porque la Ley de Patrimonio fija salvedades a esa espera de tres años cuando caduca el expediente, entre ellas, que instituciones consultivas, como lo son la UGR, el CSIC y la Real Academia de Bellas Artes, así lo soliciten. 

Lo que quieren las tres instituciones es que se retrotraiga el expediente al momento de las consultas.