Izquierda Unida de Granada ha denunciado la situación de "abandono y dejación de funciones" por parte del Gobierno andaluz ante los vertidos de aguas residuales que han obligado a cerrar en varias ocasiones playas de la Costa Tropical, como las de Carchuna y Salobreña, durante este verano. "A día de hoy, semanas después de los primeros episodios, la Junta sigue sin aclarar el origen de la contaminación fecal que ha puesto en riesgo la salud pública y ha golpeado duramente la imagen turística de la comarca", afirma IU en un comunicado.

IU recuerda que "la gestión del agua, el control de su calidad y la vigilancia del cumplimiento de la normativa son competencias exclusivas de la Junta de Andalucía, a través de la Cuenca Mediterránea Andaluza (antigua Confederación Hidrográfica del Sur)". Sin embargo, denuncia que la Administración autonómica "se ha limitado a tomar muestras de agua sin asumir su obligación de investigar, sancionar y poner soluciones, dejando a los ayuntamientos y a la ciudadanía a su suerte, mientras se degrada el litoral andaluz y se repite el mismo problema año tras año”.

IU considera que estamos ante "una auténtica estafa a la ciudadanía, que lleva décadas pagando un canon de depuración de aguas que no se ejecuta o se ejecuta de manera insuficiente. La población cumple con su obligación de pagar, pero el servicio no se presta, y el resultado es que nuestras playas se ven contaminadas y nuestros vecinos y visitantes expuestos a riesgos para su salud”, señala Izquierda Unida.

Modelo turístico insostenible

La formación subraya que este problema es la consecuencia directa de "un modelo de turismo insostenible" que multiplica la población de la Costa durante los meses estivales sin tener en cuenta los límites del medio natural y sin invertir lo necesario en infraestructuras de saneamiento y depuración. “No se trata de un accidente aislado, sino de la consecuencia de políticas deliberadas que han permitido saturar el territorio sin garantizar los servicios básicos que necesita”, han añadido.

En esta línea, IU advierte de que la política de “barra libre” urbanística promovida por el Gobierno de Moreno Bonilla no hace más que empeorar la situación. “La desregulación urbanística y el ‘todo vale’ en la promoción de nuevos desarrollos en la costa solo incrementarán la presión sobre un medio natural que ya está al límite, provocando más vertidos, más riesgos sanitarios y más daños a la imagen turística de la Costa Tropical”, denuncian.

La organización considera especialmente grave que, pese a la reiteración de estos episodios, la Junta de Andalucía ni siquiera haya presentado denuncias ni sanciones. “La ciudadanía, los negocios de hostelería y el sector turístico pagan las consecuencias de una mala gestión mientras el Gobierno andaluz se lava las manos y protege los intereses de las grandes promotoras”, ha criticado IU.

“El reparto es evidente: millones para las promotoras y mierda flotando para los andaluces”, han sentenciado desde la formación, reclamando a la Junta un plan urgente de inversiones en infraestructuras de depuración, la asunción de sus competencias en materia de control e investigación de vertidos y responsabilidades políticas por una dejación de funciones que compromete el presente y el futuro de la Costa Tropical.