Dicen que el todo es siempre más que la suma de sus partes, pero hay ocasiones en que esto se demuestra con una fuerza arrolladora. Si hablamos de cantautoras jóvenes, es difícil encontrar a tres con más talento que Julien Baker, Phoebe Bridgers y Lucy Dacus. Las tres son grandes letristas, pero ya sea por falta de inspiración melódica o por falta de imaginación en la producción, los trabajos en solitario de Dacus y Baker no me han terminado de convencer. Por el momento, la única que, en mi opinión, ha conseguido crear un disco redondo es Bridgers: su Punisher (2020) es para mí uno de los grandes álbumes del indie de lo que va de década. Dacus, en cambio, se quedó un poco a medio camino con su Home Video (2021) y Baker tuvo un tropiezo importante con Little Oblivions (2021).

Especialmente durante su brillante primera mitad, podemos contemplar cómo no solo sus voces, sino sus respectivos estilos se combinan y expanden sus posibilidades en vibrantes canciones de indie rock con toques folk

En este contexto, su proyecto colaborativo, boygenius, había sido hasta ahora un pequeño y bienvenido excurso. Su EP homónimo de 2018 contenía buenas canciones en las que las armonías entre las voces de las tres descubrían nuevas capas de profundidad emocional. Desde entonces, todas ellas habían empleado este arma con gran efectividad en sus trabajos en solitario, pero quedaba por ver si el proyecto volvería como tal. A inicios de año, nos llegó la contundente respuesta: boygenius habían grabado un álbum titulado, espartana y descriptivamente, the record. Lanzado finalmente el 31 de marzo, sus doce canciones y 42 minutos son la demostración de que Baker, Bridgers y Dacus han encontrado juntas la manera de desarrollar todo su potencial. Especialmente durante su brillante primera mitad, podemos contemplar cómo no solo sus voces, sino sus respectivos estilos se combinan y expanden sus posibilidades en vibrantes canciones de indie rock con toques folk.

El inicio no podía ser más impactante: “Without You Without Them” es una preciosa canción a capela de aires casi religiosos, con unas armonías que ponen los pelos de punta

El inicio no podía ser más impactante: “Without You Without Them” es una preciosa canción a capela de aires casi religiosos, con unas armonías que ponen los pelos de punta. Su letra invoca a todos los ancestros de una persona amada para agradecerles que la hayan hecho tal como es, e introduce uno de los temas recurrentes del álbum: el amor como una forma de conocimiento tan íntimo que duele. “Speak to me/Until your history's no mystery to me”, ruegan las tres, y parece que en realidad se están hablando las unas a las otras: he ahí otra temática recurrente, la fuerza de esta amistad a tres bandas que, por sí sola, hace que la vida merezca la pena. Y cuando el efecto hipnótico de esta oración a tres voces está en su punto álgido, de pronto entran con fuerza una guitarra eléctrica y una batería y ya estamos en “$20”, con su poderoso groove y sus frases icónicas (“in another life, we were arsonists”). La fantástica progresión de la canción hace que no se eche en falta un estribillo; el tema estalla en un final donde cada una canta frases y melodías diferentes, hasta que la voz de Bridgers se impone a las demás, aullando para que le den un billete de veinte dólares.

Volvemos después a registros más apacibles con “Emily I'm Sorry”, liderada por Bridgers. Tanto esta como la siguiente, “True Blue”, entonada por Dacus, recuerdan a sus respectivos trabajos en solitario

Volvemos después a registros más apacibles con “Emily I'm Sorry”, liderada por Bridgers. Tanto esta como la siguiente, “True Blue”, entonada por Dacus, recuerdan a sus respectivos trabajos en solitario: los sonidos apagados y atmosféricos de la primera habrían encajado a la perfección en Punisher, mientras que la segunda es una balada romántica de estructura muy similar a “VBS” o “Partner in Crime”, aunque algo más reposada. Además, esta última contiene otro pareado inolvidable: “And it feels good to be known so well/I can't hide from you like I hide from myself”. Después de esto, encontramos la composición en la que más claramente se fusionan los estilos de las tres. “Cool About It” es una canción de folk tristón donde las cantantes se alternan para cantar cada una una estrofa, unidas todas ellas por la temática: una confrontación dolorosa con una persona que las hace sentir inseguras. Una verdadera joya inspirada en la melodía de “The Boxer”, la legendaria canción de Simon & Garfunkel, pero llevada a esos terrenos más intimistas y oscuros que tan bien transitan las boygenius.

Y entonces llega el momento más efusivo del álbum: “Not Strong Enough”, un single excelso de indie rock con aroma country y un estribillo de los que levantan estadios

Y entonces llega el momento más efusivo del álbum: “Not Strong Enough”, un single excelso de indie rock con aroma country y un estribillo de los que levantan estadios. Después de este instante de éxtasis, no obstante, hay que reconocer que el nivel del disco baja un tanto. Solo hay una canción más en la que las tres cantantes unan fuerzas compositivas, la divertida, rockera y macarra “Satanist”, donde cada una invita al oyente a adoptar una identidad rebelde (satánica, anarquista, nihilista) para mostrar después lo que estas tienen de pose. Por lo demás, diría que los temas de Baker y Bridgers en esta segunda mitad son algo más mediocres. “Revolution 0” y “Anti-Curse”, en concreto, carecen de la fuerza y la claridad de intenciones de sus mejores composiciones. “Letter to an Old Poet”, por su parte, es un final algo anticlimático para el disco, pero tiene una letra impactante sobre una relación tóxica (“You think you're a good person/Because you won't punch me in the stomach”; “You made me feel like an equal/But I'm better than you/And you should know that by now/When you fell down the stairs/It looked like it hurt and I wasn't sorry”) entonada con esa convicción derrotista tan característica de Bridgers.

“Leonard Cohen” y “We're In Love” son dos canciones de amor sublimes dirigidas a sus compañeras de banda.

Las aportaciones de Dacus, en cambio, se mantienen en la excelencia. “Leonard Cohen” y “We're In Love” son dos canciones de amor sublimes dirigidas a sus compañeras de banda. La primera es una miniatura que cuenta una divertida y tierna anécdota sobre un viaje en coche que hicieron las tres: Bridgers iba conduciendo y les pidió con vehemencia que escucharan con atención una larguísima canción; Baker y Dacus obedecieron y por eso no le dijeron a su compañera que estaba conduciendo en dirección contraria, por lo que el viaje se alargó una hora. Pero Dacus dice que ese rodeo les dio más tiempo para confesarse cosas que no les habían contado a nadie, afianzando su amistad, y el estribillo incluye una referencia paradójica a la frase de “True Blue” antes citada: “You said, 'I might like you less now that you know me so well'”. Mientras tanto, “We're In Love” es una balada desoladora, ya desde su pareado inicial: “You could absolutely break my heart/That's how I know that we're in love”. La canción se asoma a la posibilidad de que el grupo se disuelva tras una pelea entre las integrantes, y recurre a una imagen conmovedora: incluso si fuera así, en una vida futura, Dacus las buscaría incansablemente hasta encontrarlas, reencarnadas, y les contaría historias de su tiempo juntas, hasta que se acordasen de todo y volviesen a estar unidas.

Incluso aunque no todo el álbum esté a un nivel sobresaliente, es evidente que las integrantes de boygenius han sacado lo mejor las unas de las otras

Así pues, incluso aunque no todo el álbum esté a un nivel sobresaliente, es evidente que las integrantes de boygenius han sacado lo mejor las unas de las otras. No solo han hecho un gran disco, combinando sus fortalezas a todos los niveles, sino que están construyendo una mitología en torno a sí mismas que las hace aún más interesantes. No es casual, por tanto, que estén teniendo un enorme éxito: han llegado al número 1 en la lista de discos más vendidos en Reino Unido y al 4 en EE.UU. (ninguna de ellas había subido del puesto 39 con sus trabajos en solitario), han hecho una película/triple videoclip dirigida por Kristen Stewart, han sido uno de los platos fuertes de Coachella y han actuado en televisión nacional. Por supuesto, las tres seguirán con sus proyectos en solitario una vez que acaben la gira, pero por ahora, boygenius son el supergrupo más emocionante del planeta. Eso hay que disfrutarlo.

Puntuación: 8/10

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