'Perro vuelven con su inimitable rock bizarro'

Blog - Un blog para melómanos - Jesús Martínez Sevilla - Viernes, 17 de Mayo de 2024
Perro – '¿Te acuerdas?'.
Portada de '¿Te acuerdas?', de Perro.
Indegranada
Portada de '¿Te acuerdas?', de Perro.

Allá por el verano de 2022, mientras me preparaba para ir a mi primer Canela Party, me sorprendió comprobar la cantidad de personas dentro del grupo de amigos con el que iba a acudir al festival que aguardaban con expectación el concierto de Perro. La banda murciana llevaba un tiempo en pausa y esta iba a ser su primera actuación en directo en tres años. Yo les guardaba bastante cariño, pero no pensaba que hubiera tanta gente que los considerase uno de los grupos clave del rock alternativo de la década de los 2010 en España (o, como dijo una vez mi amigo Antonio, “el mejor grupo de la historia de España”). El caso es que renové mi amor por la música de estos cuatro: aprecié más que nunca su idiosincrática habilidad para la melodía, sus juegos rítmicos sencillos pero hipnóticos, y sobre todo su sentido del humor absurdista. El concierto fue un momento de comunión como pocos en aquel festival, especialmente cuando cantaron su himno, “La Reina de Inglaterra”, mientras una mujer disfrazada de la mismísima Isabel hacía crowdsurfing (y apenas dos semanas antes de la muerte de la susodicha regente).

Frente a las excursiones kraut y abstractas de su anterior LP, 'Trópico Lumpen' (2018), el grupo retoma más bien el sonido más directo y popero de su clásico 'Estudias, navajas' (2015), tal como invitaban a pensar los singles

Además, a ellos cuatro se los vio rejuvenecidos, de modo que todo parecía indicar que iban a volver del todo; es decir, que editarían nueva música. Pero un año más tarde actuaron de nuevo en el Canela sin haber dado noticias en este sentido. Sí que interpretaron una nueva canción, pero frente a la ilusión del año anterior, el concierto despertó más bien algo de decepción. El grupo no parecía estar demasiado emocionado con tocar. Y sin embargo, en febrero se anunció que habían firmado por Sonido Muchacho y que tendríamos nuevo disco esta primavera. ¿Qué esperar, entonces? Pues finalmente ¿Te acuerdas?, el cuarto álbum de estudio de la carrera de Perro, es una buena adición a su discografía. Frente a las excursiones kraut y abstractas de su anterior LP, Trópico Lumpen (2018), el grupo retoma más bien el sonido más directo y popero de su clásico Estudias, navajas (2015), tal como invitaban a pensar los singles.

Así, “Escucha pariente” es una perfecta sucesora de temas como “Nueva Mufasa” o “Falso techo”, siguiendo ese patrón de base rítmica divertida y llena de pequeños detalles, líneas de guitarra y bajo muy bien entrelazadas, grandes melodías vocales y, sobre todo, un grandioso estribillo

Así, “Escucha pariente” es una perfecta sucesora de temas como “Nueva Mufasa” o “Falso techo”, siguiendo ese patrón de base rítmica divertida y llena de pequeños detalles, líneas de guitarra y bajo muy bien entrelazadas, grandes melodías vocales y, sobre todo, un grandioso estribillo. Esa capacidad del grupo para operar como una máquina perfectamente engrasada en lo instrumental al tiempo que crean momentos melódicos icónicos es desde siempre su mayor virtud, y no se quedan atrás en “Me vas a perder”. Al contrario, es posible que sea su mejor canción. En sus casi cinco minutos, los murcianos enganchan primero al oyente con un groove adictivo y lineal para, de pronto, poner toda la canción en pausa mientras Guillermo Fabregat exclama dos versos brutales: “hablo demasiado/y tú muy despacio”. Entonces llega ese estribillo trotón y magnífico. Luego la canción vuelve a bajar revoluciones, entra en una sección media donde la repetición constante, también de esas melodías vocales tan simples, te deja encandilado, hasta que primero Guillermo suelta eso de “el daño que me has hecho/lo siento, no lo acepto”, y después reaparece el estribillo, llevando a un final por todo lo alto. Una obra maestra en la que perfeccionan su propio estilo.

Hay cortes que van por otros derroteros: ahí está la amenazante “Alguien te mira”, donde parecen asomarse a un post-hardcore con puntos de épica y que tiene un bajo alucinante

El disco contiene varias canciones más que también repiten la fórmula, con algo menos de éxito que estos dos temas, pero de todos modos de manera satisfactoria. Es el caso del tercer single, “Gracias de nada”, que suena más a alt-rock noventero, con las estrofas tranquilas, los estribillos atronadores y el final de ruidismo puro propios de esa era. “Alguien tiene que mandar” también recuerda a sus clásicos, con ese sinte sencillo y repetitivo y otro buen estribillo con una estupenda letra sobre la incapacidad patológica de alguna gente para dar su opinión. “Ejercicios de fe”, por su parte, remite un poco más al sonido de Trópico Lumpen, con más énfasis en la disonancia y la mezcla de distintos elementos en la percusión, pero destaca gracias a un muy buen desarrollo, con cada sección del tema reforzando lo que vino antes. En cambio, hay cortes que van por otros derroteros: ahí está la amenazante “Alguien te mira”, donde parecen asomarse a un post-hardcore con puntos de épica y que tiene un bajo alucinante. O la bailable “Me duele España”, que pese a su estribillo normalito funciona genial gracias al punto cachondo de la letra y la música. O, con algo menos de interés, el sonido post punk de “Coches chungos, trompos guapos”, todo guitarras afiladas y ritmos impetuosos.

No obstante, y como ocurre en mi opinión con todos los discos de Perro, el punto flaco de ¿Te acuerdas? es la irregularidad: hay canciones que no brillan o incluso directamente prescindibles. Es el caso de “Y si no revienta”, con ese punto tropical que termina siendo algo ligero de más y lo convierte en un tema olvidable. “Mañaco”, por su parte, intenta seguir la fórmula antes mencionada pero se queda a medias, debido a la falta de dinamismo instrumental: sin los pequeños cambios que suelen introducir a lo largo de sus temas, el resultado es machacón y simple, con una melodía que brilla menos de lo habitual en ellos. Por último, “Dramones y mazmorras” es el corte más mediocre, un intento de introducir más oscuridad que queda lastrado por una mezcla bastante extraña, agobiante y plana, y que supone una conclusión algo torpe para el álbum. De modo que ¿Te acuerdas? no termina de ser redondo; pero es otro capítulo notable en la trayectoria de un grupo único e inimitable, parte del patrimonio musical más bizarro de este país. Ojalá nos hagan reír muchos años más.

Puntuación: 7.8/10

Imagen de Jesús Martínez Sevilla

(Osuna, 1992) Ursaonense de nacimiento, granaíno de toda la vida. Doctor por la Universidad de Granada, estudia la salud mental desde perspectivas despatologizadoras y transformadoras. Aficionado a la música desde la adolescencia, siempre está investigando nuevos grupos y sonidos. Contacto: jesus.martinez.sevilla@gmail.com