Tras la euforia desatada en la resistencia antifranquista con el triunfo de los Aliados tras la II Guerra Mundial, surgen iniciativas de recomponer la oposición, más allá de las propias que plantean las direcciones nacionales de cada una de las organizaciones.  La caída en la comarca de Baza –pero que  afecta fundamentalmente a esta población, porque sólo uno es de Caniles y otro de Banamaurel- se inculpará a un total de 89 personas. Esta caída se puede enmarcar en el intento de reorganizar los partidos y sindicatos del anterior Frente Popular. Se abrirán tres procesos (Causa 130/47, Causa 103/47 y la Causa 717/47), sin un límite preciso entre ellos, ya que se entremezclan algunos de los detenidos en varias causas. Toda la caída se efectúa por dos motivos esenciales: la reorganización de los partidos del Frente Popular y la relación de algunos detenidos con los “huidos a la sierra”. 

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Documentos obtenidos del Sumario en el Archivo de la Real Chancillería de Granada (Caja 29771, Pieza 1).

La primera caída se inicia el 27 de enero de 1947 cuando la Brigada Político Social (BPS) detiene a José Ramos Alarcón, miembro de la JSU, y a los pocos días, el 4 de febrero, a Serafín Olivares Ibáñez por sus antecedentes durante la II República y la guerra

La primera caída se inicia el 27 de enero de 1947 cuando la Brigada Político Social (BPS) detiene a José Ramos Alarcón, miembro de la JSU, y a los pocos días, el 4 de febrero, a Serafín Olivares Ibáñez por sus antecedentes durante la II República y la guerra. Ese mismo día detendrán al resto. Tras los interrogatorios, la BPS concluye que las detenciones se habían producido por “suponerles enlaces de los huidos y atracadores de dicha localidad y desarrollar actividades político-sociales de carácter extremista”. Los seis ingresan en la prisión Provincial en régimen de incomunicados y se les  abre la Causa 130/47 que pasa a jurisdicción militar.

CAÍDA DE BAZA EN FEBRERO DE 1947

(Causa 130/47)

Fuente: Causa 130/47 y elaboración propia (Archivo Real Chancillería de Granada, Caja 29771, Pieza 1).

Una de las características de esta primera caída es que mezclan las actividades netamente políticas –reorganización en este caso de la JSU- con las propias de los huidos a la sierra

Una de las características de esta primera caída es que mezclan las actividades netamente políticas –reorganización en este caso de la JSU- con las propias de los huidos a la sierra. La Brigada Político Social de Granada se había dirigido a su homónima de Baza a comienzos de 1947 para que detuviera a José Ramos Alarcón y a Serafín Olivares Ibáñez, conocedora de sus antecedentes políticos durante la II República y la guerra y, por supuesto, sospechaban de sus movimientos durante 1946. Unos días antes de ser detenido, y por su iniciativa, se habían constituido en Baza las Juventudes Socialistas Unificadas (JSU) en la que estuvieron el mismo Ramos Alarcón, Juan Ruiz Morenate, Antonio Peláez Sánchez, Fernando Segura Checa y Serafín Polaino Ronquillo. Acordaron que cada uno de ellos sería, a su vez, Jefe de Grupo y cotizar  una peseta semanal para la organización, al tiempo que se dotaron de un mínimo aparato de propaganda muy rudimentario para hacer carnets y cobrar los sellos. Durante el proceso de instrucción, en el interrogatorio ante la policía en marzo de 1947, afirma que la guerra le sorprendió en Baza donde siguió estudiando durante toda la campaña; que a comienzos de 1946 participó en algunas reuniones en  la taberna de Juan López Duarte “Chafaldín”, que fue el encargado de contactar con Pedro Martínez García(PCE) y que acordaron constituir las Juventudes Socialistas Unificadas” y , según la policía, que “con posterioridad a la terminación de la Cruzada organizó las JSU en esta población siendo el Jefe de uno de los grupos de las mismas, teniendo mucha actividad y reuniéndose con los elementos más destacados  de izquierdas en los domicilios de estos y en lugares apartados de la ciudad, con el fin de organizar los partidos políticos que componían el desaparecido Frente Popular, habiendo hecho frecuentes viajes a diferentes capitales al objeto de ponerse en contacto con los organismos provinciales de tendencia izquierdistas y traer propaganda a esta localidad para repartirla entre los individuos de ideas marxistas.” Y, al mismo tiempo, afirma que durante la guerra fue miembro del SIM, algo improbable por la corta edad que tenía entonces, pues había nacido en 1921, es decir, tenía 15 años cuando se inicia la guerra.

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Documentos obtenidos del Sumario en el Archivo de la Real Chancillería de Granada (Caja 29771, Pieza 1).

Por otra parte, y según la BPS, Olivares había sido “directivo del Partido Socialista durante la época de dominación roja en dicho pueblo; Administrador del Hospital y agente del Servicio de Información Militar (SIM), cargo éste último desempeñado en el pueblo de su naturaleza, Ugíjar, y como Subjefe en Valencia, el que se encontraba oculto en la casa de sus padres sin haberse presentado ante las autoridades competentes aludiendo la responsabilidad a que con sus actos se ha hecho acreedor y los demás individuos por saberse confidencialmente que son elementos de izquierdas que trataban de organizar las “fuerzas de resistencia”, maleantes profesionales y especialmente puedan haber tomado parte en los atracos y más hechos delictivos cometidos en Baza en los últimos meses, al mismo tiempo hallan (sic) podido tomar contacto con los rebeldes de aquella zona, siendo sus enlaces en la citada localidad”.

Y, algo similar se afirma de Ramón Lizarte. Y, aunque no tenga ni pruebas concluyentes contra ellos, se mantenía esa acusación que les servirá de base para otras detenciones, más adelante, que se sustanciarán en la Causa 717/47, que se inicia en agosto del mismo año

Es significativo que la BPS hiciera esta última acusación –la de haber tomado parte en atracos cometidos por huidos a la sierra- porque no sabía que Olivares se había ocultado en casa de sus padres desde marzo de 1939 –al ser miembro del SIM pendía sobre ellos la orden de fusilamiento- y, aunque la policía fue a buscarlo en varias ocasiones, no pudo dar con su paradero hasta su detención en febrero de 1947. Y, menos, haber participado en la reorganización de la JSU. Es decir, que las primeras detenciones se hacen a río revuelto y, casualmente, unirán a distintos elementos que, en la mayor parte de los casos, nada tienen que ver entre sí. Por ejemplo, de uno de los detenidos, Antonio Doménech, se concluye que “durante la guerra de Liberación no tuvo actividades políticas y en la actualidad se desconocen sus ideas, teniéndose conocimiento que se reunía con los bandoleros Dámaso García Pérez “El Tule” y Francisco Miras Amber “El Paquillo” a los cuales servía de enlace y les preparaba los atracos, habiendo realizado viajes con frecuencia a pueblos de la provincia para ponerse en contacto con elementos huidos a otras localidades.” Y, algo similar se afirma de Ramón Lizarte. Y, aunque no tenga ni pruebas concluyentes contra ellos, se mantenía esa acusación que les servirá de base para otras detenciones, más adelante, que se sustanciarán en la Causa 717/47, que se inicia en agosto del mismo año.

Todo parece indicar que de las seis detenciones solo tres tienen cierta relación con la reconstrucción de la JSU

Todo parece indicar que de las seis detenciones solo tres tienen cierta relación con la reconstrucción de la JSU. Es el caso de José Ruiz Morenate que, aunque afiliado a la JSU durante la guerra, por su corta edad –había nacido en 1922- no tuvo actividades significativas, pero que a partir de 1946 –y según las conclusiones del fiscal- “su taller de hojalatería ha sido centro de reuniones y enlace de los marxistas. Su padre, Juan Ruiz Caler, fue miembro del Comité Revolucionario durante la guerra y una hermana suya, fallecida hace unos dos años, fue locutora de la emisora roja que tenían los rojos en esta localidad durante la guerra”; o el de Félix Peláez, que reconoce en los interrogatorios que en 1938 se afilió a la JSU y que, por reemplazo, ingresó en el ejército republicano en enero de 1939 en Intendencia en el mismo Baza.” Por ello, de esta primera causa, al no tener pruebas concluyentes sobre ellos, al final, todos ellos serán absueltos, excepto Serafín Olivares que será condenado a 12 años y 1 día de reclusión por el delito de “Auxilio a la rebelión”, por los cargos que pesaban sobre él por su actuación durante la guerra civil.

La Causa 103/47

Posteriormente, y derivado de ella, se amplía a 59 personas de la comarca de Baza que habían comenzado a reunirse desde enero de 1946 abarcando todas las tendencias políticas: socialistas, comunistas, republicanos y sindicalistas de la UGT y CNT. A todas ellas se les abre la Causa 291/47 (acumulada posteriormente a la 103/47), por la jurisdicción militar, acusados de “Delito de Bandidaje y Terrorismo y Organización Clandestina Comunista”. Para hacer un seguimiento de esta caída, partamos de las conclusiones del Ministerio Fiscal, tras los interrogatorios:

PSOE

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Logotipo del PSOE. Fondo de pegatinas de Alfonso Martínez Foronda, cedidas al Archivo Histórico de CCOO de Andalucía.

Juventud Socialista Unificada (JSU)

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Logotipo de las Juventudes Socialistas Unificadas. Fondo de pegatinas de Alfonso Martínez Foronda, cedidas al Archivo Histórico de CCOO de Andalucía.

CNT

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Logotipo de CNT.

PCE

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Logotipo del PCE. Fondo de pegatinas de Alfonso Martínez Foronda, cedidas al Archivo Histórico de CCOO de Andalucía.

UGT

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Fondo de pegatinas de Alfonso Martínez Foronda, cedidas al Archivo Histórico de CCOO de Andalucía.

Fuente: Causa 103/47 y elaboración propia (Archivo Real Chancillería de Granada, Caja 29771, Pieza 1).

En efecto, desde finales de 1945 y comienzos de 1946, diversos militantes de izquierda –la mayoría con antecedentes penales que habían sido procesados y condenados al final de la guerra  civil-, intentarán reconstruir sus partidos y, al mismo tiempo, reeditar el Frente Popular. En no pocas declaraciones se afirma que les animó a ello “las circunstancias internacionales”, es decir, la derrota del fascismo y su esperanza de que la ONU, y la ayuda de los Aliados, acabaran con el franquismo, de forma que, cuando esto ocurriera, las organizaciones del Frente Popular debieran estar preparadas para hacerse cargo, de nuevo, de la situación que se derivase de esa actuación.

El ritmo de cada una de las organizaciones será distinto. Así, en el caso del PCE, varios detenidos como José Manuel Camus Anguita o Miguel Aragón Molina, admiten que a finales de 1945 fue Luis Mateos Jaén el que se puso en contacto con ellos para reorganizar el partido

El ritmo de cada una de las organizaciones será distinto. Así, en el caso del PCE, varios detenidos como José Manuel Camus Anguita o Miguel Aragón Molina, admiten que a finales de 1945 fue Luis Mateos Jaén el que se puso en contacto con ellos para reorganizar el partido. Y el Ministerio Fiscal concluye que fue en mayo de 1946 cuando se configuró definitivamente nombrando presidente del mismo a Ramón Sánchez Moreno.  En las declaraciones de algunos detenidos, aparece el nombre de José María Irigaray Fernández como el contacto que tenían con el Comité Provincial del PCE y era la persona a la que le entregaban las cotizaciones o bien en Granada o desplazándose él mismo a Baza. Éste, que había sido miembro de UGT y del PCE, había sido condenado a muerte y luego conmutada por la de reclusión perpetua en un Consejo de Guerra celebrado en Granada en julio de 1939. (Causa 17.371/39). Un informe de la BPS de Granada, fechado el 12 de mayo de 1947, afirma que Irigaray “trabajaba en la Sociedad de Crédito Santa Lucía en esta capital, que se decía que era enlace entre los militantes de Granada, Baza y tal vez Huéscar, según las gestiones realizadas, se encuentra huido y en ignorado paradero desde hace bastante tiempo ya que desapareció de Atarfe donde tenía su residencia.” Es decir, que el PCE de Baza ya había establecido contacto con el Comité Provincial de ese partido.

En el caso de la UGT/PSOE todo parece indicar que fue a mediados de 1946 cuando se constituyó el partido nombrando Presidente a Ramón Yuste Valenzuela y de la UGT a José Ramón Suárez Peñalver, así como otros cargos directivos, aunque por la relación de partido y sindicato, se entremezclaban en alguna ocasión

En el caso de la UGT/PSOE todo parece indicar que fue a mediados de 1946 cuando se constituyó el partido nombrando Presidente a Ramón Yuste Valenzuela y de la UGT a José Ramón Suárez Peñalver, así como otros cargos directivos, aunque por la relación de partido y sindicato, se entremezclaban en alguna ocasión. Respecto de la CNT y las Juventudes Libertarias, en las declaraciones de uno de sus responsables, Antonio Almirante García, se afirma que se habían constituido, también, en mayo de 1946.

Porque, ¿quiénes fueron sus protagonistas? Si tomamos esta referencia, observamos que 27 de los 59, es decir, casi la mitad de los inculpados de la caída de 1947, habían sido protagonistas con el Frente Popular y habían participado en la defensa de la República durante la guerra. La mayoría de ellos habían sido condenados previamente por “Auxilio a la rebelión”.

PERSONAS DE LA CAÍDA DE 1947 QUE HABÍAN SIDO DETENIDOS/PROCESADOS PREVIAMENTE EN CONSEJO DE GUERRA

Fuente: Martínez Foronda, Alfonso, Sánchez Rodrigo, Pedro y Galisteo Fernández, Francisco, Diccionario de la represión en Granada (1931-1981), en elaboración.

En casi todos los casos, fueron saliendo en libertad condicional entre 1942 y 1944, es decir, que iniciaron esa reconstrucción dos o tres años más tarde

En casi todos los casos, fueron saliendo en libertad condicional entre 1942 y 1944, es decir, que iniciaron esa reconstrucción dos o tres años más tarde. Por otro lado, un 30 por 100 de los inculpados, los nacidos entre 1900 y 1910, habían conocido la experiencia de la guerra civil, aunque su participación en ella, por su corta edad, no fue especialmente relevante. Tan solo un 20 por 100, los nacidos entre 1915 y 1922, no habían tenido papel alguno en el conflicto armado, aunque todos ellos tenían lazos familiares con los represaliados. Es decir, que en no pocos casos de estos últimos hay una transmisión ideológica familiar. Por ejemplo, los hermanos José y Juan Ruiz Morenate no participaron en nada durante la guerra por su corta edad, pero su padre, Juan Ruiz Caler, había sido miembro del Comité Revolucionario durante la guerra civil.

Muchos de ellos, participasen o no en la guerra civil, pertenecían a familias de represaliados

Muchos de ellos, participasen o no en la guerra civil, pertenecían a familias de represaliados. Por poner algunos ejemplos, al hermano de Manuel Hernández Sola, Baldomero, lo habían fusilado el 11 de febrero de 1941 (Causa 19.369/39); los hermanos de Juan José Sánchez Quirantes, Eduardo y Carlos, habían sido condenados a reclusión perpetua (Causa 17.192/39); los hermanos de Juan Martínez Valdivieso, José, Manuel y María habían sido condenados por Consejos de Guerra a diversas penas, así como los hermanos de Cecilio Langa Rosel, Emilio y José. Aunque hay más casos, para no ser prolijos, esto demostraba que los protagonistas de la reconstrucción de la izquierda en Baza tenían estrechos lazos familiares que provenían de su participación durante la II República y la guerra civil.

Bibliografía:

• GALLEGOS MORALES, Sebastián Manuel: Los emboscados: Baza años 40. Visión Libros, 2012.
• JIMÉNEZ CUBERO, José Antonio: La Guerrilla antifranquista en Andalucía, Censo y relación  de guerrillas y guerrilleros (1939-1952). 2018.
• HIDALGO CÁMARA, Juan, La justicia militar en Granada: Los jueces instructores, causas y procesados de Granada de 1936-1950 (Universidad de Almería, Tesis doctoral, 2007.
• HIDALGO CÁMARA, Juan: “Cúllar. La Guerra Civil a través de sus causas”. Revista Péndulo, Papeles de Bastitania, nº 7, Baza, 2006.
• HIDALGO CÁMARA, Juan: Represión y muerte en la provincia de Granada, 1936-1950. Arráez Editores, Mojácar (Almería), 2014.
• MARTÍNEZ FORONDA, Alfonso, SÁNCHEZ RODRIGO, Pedro y GALISTEO FERNÁNDEZ, Francisco, Diccionario de la represión en Granada (1931-1981), en elaboración.
• ROMERO NAVAS, José Aurelio: Censo de guerrilleros y colaboradores de la Agrupación Guerrillera de Málaga-Granada (1944-1960). Servicio de Publicaciones, Centro de Ediciones de la Diputación Provincial de Málaga, 2004.
• RUIZ ESTEBAN, Francisco: La partida guerrillera de Ratero y el movimiento guerrillero antifranquista en la provincia de Granada, Universidad de Granada, 2005. Memoria de la Comandancia de la Guardia Civil de Granada. Servicio Histórico de la Dirección General de la Guardia Civil.
• Archivo Histórico del PCE, Informes del interior, Jacques 83.
• Archivo Real Chancillería de Granada, Caja 29771, Pieza 1.

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Alfonso Martínez Foronda (Jaén, 1958). Es Licenciado en Filología Hispánica por la Universidad de Granada. Desde 1984 es profesor de Enseñanza Secundaria. Ya jubilado, su último destino fue el IES Albayzín. Ha sido secretario general de CCOO de Jaén desde 1993-2000 y desde 2004 es miembro de la Comisión Ejecutiva de CCOO-A, desde donde ha presidido hasta 2103 las Fundaciones de Estudios Sindicales-Archivo Histórico y la de Paz y Solidaridad.Como investigador, ha publicado numerosos artículos de opinión sobre aspectos docentes y sociales. Colaborador habitual del Diario Jaén desde 1994-2000 publicó La firma del viento (2007), una antología de artículos de opinión. Como investigador del movimiento obrero andaluz ha publicado La conquista de la libertad. Historia de las Comisiones Obreras de Andalucía (1962-1977), en 2005; De la clandestinidad a la legalidad (Breve historia de las Comisiones Obreras de Granada), en 2007; sobre las Comisiones Obreras de Jaén desde su origen a la legalización del sindicato (2004); la unidad didáctica El sindicalismo durante el franquismo y la transición en Andalucía; diversas biografías de dirigentes sindicales andaluces como Ramón Sánchez Silva. Al hilo de la historia (2007); Antonio Herrera. Un hombre vital, en 2009; Andrés Jiménez Pérez. El valor de la coherencia, en 2010, entre otros. En 2011 su investigación La dictadura en la dictadura. Detenidos, deportados y torturados en Andalucía durante el Estado de Excepción de 1969, (2011), fue premiada por la Junta de Andalucía como la mejor investigación social de ese año. Posteriormente, ha publicado La “prima Rosario” y Cayetano Ramírez. Luchadores por la libertad en una provincia idílica (2011); sobre el movimiento estudiantil en la UGR, con otros autores, “La cara al viento. Estudiantes por las libertades democráticas en la Universidad de Granada (1965-81); sobre la historia del movimiento obrero granadino, con su investigación La lucha del movimiento obrero en Granada. Paco Portillo y Pepe Cid: dos líderes, dos puentes“, 2012; sobre el Tribunal de Orden Público, La resistencia andaluza ante el Tribunal de Orden Público en Andalucía (1963-1976); Diccionario de la represión sobre las mujeres en Granada (1936-1960) o La resistencia malagueña durante la dictadura franquista (1955-1975). Actualmente, junto a Pedro Sánchez Rodrigo, está confeccionando un diccionario sobre la represión en Granada desde la II República al golpe de estado de 1981.



Desde hace años es colaborador habitual de El Independiente de Granada, donde ha publicado numerosos artículos y reportajes sobre Memoria Democrática, muy seguidas por lectoras y lectores de este diario digital.

Pedro Sánchez Rodrigo (Burgos, 1960). Es licenciado en Filosofía y Letras por la Universidad de Granada, donde cursó la especialidad de Historia Contemporánea. Ha ejercido como profesor de Secundaria de Geografía e Historia desde 1984. Desde hace años colabora con la Fundación de Estudios Sindicales- Archivo Histórico de CC.OO.-A.. Ha participado en la obra colectiva “La cara al viento. Estudiantes por las libertades democráticas en la Universidad de Granada (1965-81)”, publicada por la Editorial El Páramo en el año 2012, y, junto con Alfonso Martínez Foronda, es autor de “La cara al viento.  Memoria gráfica del movimiento estudiantil de Granada durante la dictadura y la transición”, obra publicada por la Universidad de Granada, también en 2012. Ha colaborado en el volumen La Resistencia andaluza ante el tribunal de orden público en Andalucía. 1963-76, editado en 2014 por la FES/Archivo Histórico de CC.OO.-A y la Junta de Andalucía, y en otros trabajos colectivos, como De la rebelión al abrazo. La cultura y la memoria histórica entre 1960 y 1978 (Diputación de Granada, 2016) y La Universidad de Granada, cinco siglos de historia. Tiempos, espacios y saberes, coordinado por Cándida Martínez López (III Volúmenes, EUG, Granada, 2023) con el artículo “Antifranquismo en las aulas. El movimiento estudiantil”. También con Alfonso Martínez Foronda ha publicado el libro “Mujeres en Granada por las libertades democráticas. Resistencia y represión (1960-1981)”, publicado en 2016 por la Fundación de Estudios y Cooperación de CC.OO. Actualmente está jubilado y colabora en la elaboración del Diccionario de la Represión en Granada 1931-1981.