Los agricultores de cultivos frutales subtropicales cuyas plantaciones se han visto afectadas, en una extensión cuyas primeras estimaciones se sitúan en torno a las 160 hectáreas, por el incendio de la zona del camino de Peña Escrita en Almuñécar, ya controlado tras conllevar incluso la activación de la fase de preemergencia prevista por la Junta para estos casos, han comenzado a valorar daños en colaboración con el Ayuntamiento de este municipio de la costa de Granada.

En declaraciones a los medios, el alcalde de Almuñécar, Juan José Ruiz Joya, del PP, ha indicado que, una vez que el fuego se dé por extinguido definitivamente, el Ayuntamiento trabajará de la mano del resto de las administraciones para explorar vías de financiación para colaborar con estos agricultores que han perdido sus plantaciones en el incendio, que se declaraba el pasado martes a última hora en la zona del camino de Peña Escrita.

Ruiz Joya, que ha agradecido la labor del Infoca, el Consorcio Provincial de Bomberos y las instituciones y Fuerzas y Cuerpos de Seguridad en las tareas de estabilización y control del fuego, ha detallado que tocará hacer una "valoración de todas las pérdidas que se han originado" así como "explorar algunas vías de subvención o de financiación a través de las administraciones" superiores, como, ha detallado el alcalde, el Gobierno o la Junta de Andalucía.

Se trata principalmente de "intentar buscar soluciones a los agricultores que han perdido sus producciones", siendo aún "la prioridad" del equipo de gobierno local "extinguir este incendio y una vez que esté extinguido" activar los trabajos para "intentar paliar de alguna manera los daños sufridos".

El concejal de Agricultura de Almuñécar, Carlos Ferrón, ha detallado a Europa Press que el consistorio trabaja con la intención de facilitar en el Ayuntamiento la información que puedan necesitar los afectados a partir del lunes, así como asesorarles en las valoraciones que hayan de hacer para poder optar a "todas las líneas posibles" de financiación.

Lo prioritario en muchas de estas pequeñas plantaciones será introducir nuevas líneas de riego, y una dotación a instalar puede valorarse en unos 15.000 euros por hectárea

Lo prioritario en muchas de estas pequeñas plantaciones será introducir nuevas líneas de riego, y una dotación a instalar puede valorarse en unos 15.000 euros por hectárea. A falta aún de comprobación sobre el terreno, las fincas que han resultado calcinadas no podrán cultivarse en las próximas temporadas, pero las que hayan estado afectadas por "golpe de calor" pueden recuperarse de cara al año que viene.

De este modo, en primer lugar, "hay que valorar el porcentaje de pérdidas de la plantación" y "si es recuperable o no" teniendo en cuenta también cuestiones como si está afectada la masa foliar o también los vasos conductores de savia, con las recomendaciones técnicas pertinentes para podas o operaciones similares, ha detallado Ferrón, que también advierte del coste que puede conllevar, pendiente asimismo de valoración, el daño al tendido eléctrico.

Fuentes municipales han detallado a Europa Press que la figura antiguamente conocida como zona de declaración catastrófica no es aplicable a este caso de Almuñécar sino que las ayudas se habrán de gestionar en un primer momento en base a los seguros agrarios contratados por las plantaciones afectadas, y al consorcio que existe para este tipo de sucesos.

Las fincas de cultivo afectadas no son industriales sino de las conocidas como "de segunda actividad" y la mayoría del terreno afectado es monte bajo, normalmente antiguas fincas de olivos y almendros que se dejaron de cultivar décadas atrás, y matorral.

Algunas de subtropicales como el aguacate se han quedado como islas en medio del terreno arrasado en tanto son minifundios en medio de una orografía escarpada, pero han podido perder las facilidades de riego automatizado derivadas de los sistemas de la zona, con la pérdida de agua que conllevará para la producción que se perderá para este verano.

La estabilización del fuego, que habría afectado a un total de unas 590 hectáreas y se quedó en uno de sus dos focos en el límite con la provincia de Málaga, cerca de terrenos protegidos, implicaba ya a última hora del miércoles, que el incendio, sin llegar a estar controlado, evolucionaba favorablemente al no presentar frentes activos que hagan avanzar el fuego libremente. La pasada medianoche su control ha sido un paso más para darlo por extinguido.

El incendio ocasionó en sus inicios que una mujer de 57 años resultara afectada por inhalación de humo y tuviera incluso que ser trasladada de la zona del barranco Matachina al hospital Santa Ana de Motril para una mayor valoración, recibiendo luego el alta.