Granada ha terminado la mitad del año hidrológico, el periodo octubre 2019-marzo 2020 con un 27% menos de lluvia que el promedio histórico. Así lo reflejan los datos de precipitaciones registradas en la estación meteorológica del Aeropuerto de Granada. 

En los últimos seis meses la estación de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha recogido 191 litros por metro cuadrado, cuando lo normal (media del periodo 1981-2010 que se utiliza como referencia) son 262 litros, lo que significa que ha llovido un 27% menos de lo habitual. Y hay que recordar que también hubo menos lluvia de lo normal en la primera mitad del año hidroógico 2018-2019, cuando se registraron 221 litros, un 15% menos que el promedio histórico.

Tras un mes de febrero que fue el más caluroso desde que hay registros en Granada y prácticamente seco, pues solo se contabilizaron 1,2 litros de lluvia en el aeropuerto el último día del mes, el 29, este pasado mes marzo sí ha registrado precipitaciones cercanas a lo habitual, pero por debajo de la media: 28,9 litros por metro cuadrado, frente a los 32 de la media histórica en ese mes. Abril, al menos, ha empezado con lluvia. 

Los embalses granadinos tienen ahora menos agua que hace un año. Tan solo el pantano de San Clemente (el tercero más grande de la provincia, que suele registrar bajos niveles de llenado) supera las cifras de hace doce meses, con un 20,1% a 1 de abril de este año, frente al 15,2%.

Fuente: Junta de Andalucía

Como se ve en la tabla, Canales está prácticamente igual que el año pasado por estas fechas y el resto contienen algo menos de agua que hace un año. La situación todavía no es preocupante, pero hay que tener en cuenta que, tal y como han transcurrido los últimos años, con el cambio climático cada vez más más presente, únicamente queda este mes de abril con posibilidad de lluvias abundantes, ya que a partir de mayo las precipitaciones pueden bajar notablemente, y en cuestión de lluvia los tres meses siguientes, junio, julio y agosto, no suelen aportar ya prácticamente nada, con lo que se llegaría al término del año hidrológico con un desfase sobre el promedio histórico aún mayor que el actual y con los embalses en una situación muy delicada. 

Y es que el calentamiento global resulta cada año más evidente, como así ha pasado con esta primera mitad del año hidrológico, en la que, de los seis meses (de octubre 2019 a marzo 2020), tan solo noviembre fue más frío de lo normal. El resto de meses fueron más cálidos que la media, especialmente febrero, que batió récords de temperaturas en ese mes en Granada.