El sector de Administración Local de CSIF Granada ha denunciado el estado de “abandono” en el que se encuentran las plantillas de personal bibliotecario y auxiliar de las bibliotecas municipales de la capital. Según datos que maneja el sindicato, en la actualidad estos centros funcionan con un tercio menos de plantilla, una dotación que apenas cubre las necesidades básicas de estos centros. La falta de personal se viene supliendo con dotación de efectivos subalternos, una categoría profesional que no está adscrita al servicio de bibliotecas, sino a regencia, y cuya función es la de abrir los edificios municipales y de atender a los usuarios, explica CSIF.

Tal como ha expresado el responsable de Administración Local de CSIF Granada, Ignacio Conde Pipó, “esta situación no es nueva, sino que se lleva arrastrando desde hace años, pero ahora ha empeorado con la supresión y jubilación de parte del personal subalterno y algunos centros como la biblioteca San Francisco Javier han quedado atendidas por una sola persona en horario de tarde mientras que otras, como la biblioteca de La Chana o Francisco Ayala, se han quedado sin personal para atender las salas de lectura”.

Traslado a otros servicios

Ignacio Conde Pipó denuncia que la cobertura de las plazas vacantes por personal subalterno “penaliza” a las  bibliotecas, ya que continuamente este colectivo formado por 10 trabajadores es requerido para atender necesidades de otros centros como servicios sociales y centros cívicos, dejando con menos efectivos a las bibliotecas. Asimismo, en caso de incidencia por enfermedad, bajas, licencias o vacaciones del personal de bibliotecas, “la plantilla se queda bajo mínimos dándose el caso de abrir con solo dos trabajadores para atender los cerca de 300 préstamos que de media se tramitan en una tarde normal”, indica Conde Pipó.

El responsable sindical recuerda que CSIF ya ha demandado una solución al respecto en distintas ocasiones y vuelve a reiterar la necesidad de “reorganizar” el servicio “para que los trabajadores subalternos sean adscritos permanentemente a las bibliotecas como personal auxiliar, sin ser trasladados continuamente”, afirma. De igual modo, el sindicato exige que se oferten más plazas de auxiliar ya que, de momento, el Ayuntamiento de Granada solamente ha sacado una, cuyo proceso selectivo tardará al menos dos meses.

Por último, el sector de Administración Local de CSIF Granada ha reclamado una mayor inversión en mejoras, tanto de fondos bibliográficos como de infraestructuras, que en algunos casos presentan un estado “preocupante”. En este sentido, Conde Pipó ha recordado los problemas de insonorización y de accesibilidad que presenta la biblioteca Cartuja o algunos edificios obsoletos como la biblioteca Albaicín, con más de 50 años de antigüedad.

La Central Sindical reclama la elaboración de un plan integral de mejora del servicio que implique a las áreas de Personal, Cultura, Urbanismo y Mantenimiento y que contemple, entre otras medidas, el refuerzo y la reorganización del personal, la renovación de los fondos literarios, la mejora del mobiliario y la eficiencia energética de los edificios.