4.097 suicidios se produjeron en España en 2022, una cifra que nos sitúa en la cifra más alta desde que tenemos registros. Más de 11 muertes por suicidio cada día en España en este año pasado. Superamos en 94, la cifra del año 2021, con un incremento de 2,3% con respecto al año anterior. Casi dos de cada tres fallecidos por suicidio fueron hombres (3.042 frente a 1.055 mujeres).

Hay diferentes señales y factores precipitantes en los diferentes grupos de edad. Destaca, sobre todos los demás: que la persona lo exprese explícita, o implícitamente

Hay diferentes señales y factores precipitantes en los diferentes grupos de edad. Destaca, sobre todos los demás: que la persona lo exprese explícita, o implícitamente. Cómo decía el psicólogo Pedro Martin-Barrajón, hay comentarios como "no sirvo para nada", "estaríais mejor sin mí", "ojalá me acostara y no me despertara nunca...", "No quiero seguir siendo una carga"... que deberían alertarnos. Sabemos que más del 80% de las personas que se suicidaron lo había manifestado o había dado muestras de su intención antes. Una de cada cinco personas fueron el mismo día al médico de atención primaria y alrededor del 60% pidieron cita durante la última semana.

El número de suicidios en menores de 20 años fue de 84 en 2022, frente a los 75 de 2021. Seguimos incrementando la cifra de muertes por suicidio en esta población

En 2022 se han registrado 345 suicidios en menores de 30 años. De las 345 personas menores de 30 años que se suicidaron, 12 fueron en la franja de 10 a 14 años (afortunadamente entre edades de 10 a 14 años los suicidios se han reducido casi a la mitad con respecto al año 2021, de 22 a 12), 72 en la de 15 a 19 años, 128 entre 20 y 24 años y 133 entre los 25 y 29 años. El número de suicidios en menores de 20 años fue de 84 en 2022, frente a los 75 de 2021. Seguimos incrementando la cifra de muertes por suicidio en esta población. Entre los más jóvenes, había 12 menores entre los diez y los catorce años (una cifra terrible) y 72 entre los quince y los diecinueve. Entre los 20 y los 29 años se suicidaron 261 personas. La década en la que se registran más suicidios es en la cincuentena, con 924. Estas cifras muestran un aumento significativo en el caso de los hombres (3.042 frente a 2.982 en 2021) pero mejoran ligeramente en el caso de las mujeres. 

Si miro las cifras por suicidio en los últimos años, vemos que:

• 4.097 en 2022
• 4.003 en 2021
• 3.941 en 2020
• 3.671 en 2019
• 3.539 en 2018
• 3.679 en 2017
• 3.569 en 2016
• 3.602 en 2015
• 3.910 en 2014
• 3.870 en 2013
• 3.539 en 2012
• 3.180 en 2011
• 3.158 en 2010

Hasta 26 de las 52 provincias y ciudades autónomas superan la media mundial de mortalidad por suicidio, y son las de Galicia, Andalucía, Castilla y León y Aragón las que presentan las tasas más altas de toda España, si bien en Melilla, Lérida, Palencia, Zamora y Navarra es donde más ha aumentado desde el inicio de la pandemia. Y en España el suicidio mata a casi tres veces más personas que los accidentes de tráfico.

De las personas que tienen un intento de suicidio, solo el 35% había tenido relación con la red de salud mental, pero sí habían contactado en muchas ocasiones con el médico de cabecera o los servicios sociales por problemas de soledad o económicos

Quiero destacar las cifras de Andalucía. En 2022 se atendieron en Urgencias de hospitales andaluces 392 intentos de suicidio en menores, cifras preocupantes. Y sabemos que de las personas que tienen un intento de suicidio, solo el 35% había tenido relación con la red de salud mental, pero sí habían contactado en muchas ocasiones con el médico de cabecera o los servicios sociales por problemas de soledad o económicos.

Sabemos también que uno de los factores sobre los que se tiene evidencia es que haber tenido una tentativa de suicidio multiplica por 50 la probabilidad de intentarlo de nuevo. Además,

La cantidad de profesionales formados es claramente insuficiente para cubrir las necesidades en España

Uno de los métodos que han demostrado eficacia en países donde se han puesto en marcha son los teléfonos para atender a personas con pensamientos suicidas. En España, en 2022, se lanzó el teléfono 024. Una buena idea aunque criticable por su forma de aplicación, por falta de preparación de las personas que lo atienden.

Y necesitamos seguir investigando y estudiando el tema. No sabemos el número real de suicidios y mucho menos de intentos. No sabemos por qué se suicida la gente. Nos preguntan por qué hay más suicidios en Asturias o Galicia que en otras regiones de España y no tenemos ni idea. No conocemos las causas principales por las que se suicida la gente. Solo conocemos cinco datos: Edad, sexo, comunidad autónoma, método de suicidio y mes en el que se suicidan. Y para tomar medidas preventivas eficaces necesitamos conocer las posibles causas que han llevado a una persona a suicidarse.

El número de casos con conducta suicida ha experimentado un acentuado crecimiento en el periodo 2012-2022 (1.921,3%), destacando el incremento producido en el periodo post-COVID-19, entre 2020 y 2022 (128%)

El número de casos con conducta suicida ha experimentado un acentuado crecimiento en el periodo 2012-2022 (1.921,3%), destacando el incremento producido en el periodo post-COVID-19, entre 2020 y 2022 (128%). Y eso obliga a decirnos que necesitamos tomarnos en serio el problema, necesitamos creer que es posible atajarlo y necesitamos dedicarle al tema, los recursos necesarios. Y en ese marco, tener claro que un buen sistema de salud pública y asistencia sanitaria y SOCIAL tiene un efecto protector. Y en esa proyección, es fundamental que la atención primaria tenga tiempo para formarse en la prevención de suicidios y en prestar atención a los casos que se les presentan en la consulta.

Como dice mi amigo Miguel Guerrero, un psicólogo íntegro: Si la prioridad hace dos años venía marcada en la mejora de la atención a nuestros jóvenes, la detección precoz y la prevención del suicidio, es el momento de reflexionar y apostar de verdad por estrategias y acciones más efectivas que efectistas. Y además es necesario decir que cerrar programas de prevención de suicidio en el Sistema Nacional de Salud, ni es ético ni humanizado: es nuestra RESPONSABILIDAD.