Breve y contenida se mostró Marta Gutiérrez a pesar de que Vamos Granada entra en el Ayuntamiento con tres concejales, los que les otorgan los 14.032 granadinos que han confiado en la formación avalada por Podemos. La gente volvió a centrar su discurso y pocas pistas sobre su posición ante los necesarios pactos, salvo que no apoyará un proyecto que no suponga el cambio de rumbo pedido por la ciudadanía. 

Un cambio que comenzó, según recordó, hace cuatro años el 15M, con la conciencia en la gente de que se gobernaba "de espaldas a la mayoría". Y con eso presente, dijo que tiene "claro" que el planteamiento de su formación se basa en el cambio de políticas en la ciudad. Cambio de métodos y tiempo para los acuerdos sobre cuestiones concretas. Porque Marta Gutiérrez no habla de pactos. Y cuando se le pregunta al respecto, insiste en que no apoyarán algo que no represente el rumbo nuevo que anhelan. Un gobierno en el que se conozca a qué se dedican los recursos públicos y en el que la gente -de nuevo en su discurso- pueda decidir a qué se dedican.

No habla de pactos, pero su participación es clave para la opción de un gobierno de izquierdas que, por primera vez en años, permite el resultado electoral. Y anoche ya, en otras sedes, sí que se hablaba de ello. 

"Nuestra propuesta está clara, y es poner las necesidades de las personas en el centro, con transparencia absoluta", manifestó en su primera valoración sobre los resultados en Granada capital, porque evidencian que el "cambio no se para, que ya está aquí".