La Junta de Gobierno Local ha dado el visto bueno este viernes al proyecto del área de Movilidad para buscar fondos que financien la implantación de las llamadas Zonas de Bajas Emisiones, que son áreas en las que se restringe la circulación de vehículos privados, y la renovación de la flota de autobuses. 

Aunque en su día el anterior equipo de gobierno ya apuntó la intención de implantar esta especie de 'Granada central', en el área de Movilidad no había nada concretado al respecto. Así que la Delegación que dirige la teniente de alcalde Raquel Ruz, ha trabajado durante todo el verano para presentar ahora el proyecto al Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana para obtener financiación a través de los fondos de recuperación y resiliencia. 

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Raquel Ruz y Jacobo Calvo en rueda de prensa. j.a./ayto.granada

"Nuestra actividad es tan intensa que en un mes hemos tenido que redactar los proyectos que otros no fueron capaces en mucho más tiempo", ha apuntado al respecto Ruz, incidiendo en que se encontró una Delegación" en la que no había proyectos hechos, sólo declaración de intenciones en prensa".

"Mientras otras administraciones siguen apostando por el vehículo privado y por inversiones multimillonarias en infraestructuras innecesarias, nosotros sí apostamos por la calidad del aire, el fomento transporte público y la movilidad sostenible", resalta Ruz

En rueda de prensa, Ruz ha recordado que la calidad del aire es "uno de los grandes problemas" de la ciudad y a mejorarla va encaminado el proyecto. "Mientras otras administraciones siguen apostando por el vehículo privado y por inversiones multimillonarias en infraestructuras innecesarias [en alusión a la Ronda Este rescatada por la Junta], nosotros sí apostamos por la calidad del aire, el fomento transporte público y la movilidad sostenible", ha manifestado. 

El proyecto redactado plantea una inversión total de 14,9 millones de euros, de los que aspira a financiar, a través del Ministerio, 10,5. Para concurrir a estas subvenciones había fijado un tope máximo de 45 euros por habitante y el Ayuntamiento de Granada ha decidido ir "hasta el máximo que permite la orden para traer para Granada el máximo de inversiones posible". 

Las ayudas se estructuran en 4 líneas, según ha explicado la concejala:

1.- Zonas de Bajas Emisiones y todas las inversiones necesarias para la limitación del acceso de vehículos privados a la zona central de la ciudad, no sólo control de acceso sino otras inversiones que deben acometerse.

2.- Medidas para la transformación digital y sostenible del transporte público, para hacer que los autobuses sean más eficientes.

3.- Transformación de la flota hacia buses eléctricos y de hidrógeno. 

4.-  Puntos de recarga.

Ruz ha agradecido el esfuerzo al área de Movilidad, que ha trabajado todo el verano en el desarrollo del proyecto, incidiendo, en alusión al anterior gobierno que, "una cosa es venderse en prensa y vender humo y otra tener los proyectos trabajados y redactados para conseguir inversiones tan importantes en estos tiempos de pandemia".

Ha defendido la apuesta por una movilidad sostenible del gobierno local frente a una concepción de movilidad que tiene "más que ver con el siglo pasado que con el siglo XXI".

El objetivo marcado por el gobierno local es que las actuaciones puedan estar finalizadas para diciembre de 2023. El plazo, ha aclarado, puede ser mayor, pero el proyecto municipal ha comprometido esa fecha. 

La Zona de Baja Emisiones establece una restricción para el tráfico rodado privado en la zona central y barrios históricos, "que al final son los más perjudicados". Se permite entrar a los vehículos ecológicos, eléctricos o de residentes. Su implantación, ha explicado Ruz, lleva fases y círculos concéntricos con más restricciones a medida que se acerquen al centro.

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