Comienzan las obras de rehabilitación integral del Hospital San Juan de Dios, cuatro años después de la cesión gratuita
Cuando el entonces presidente de la Diputación granadina, el popular Sebastián Pérez, firmó el abril de 2015 la cesión gratuita del inmueble a la Orden, -aunque sin escrituras firmadas, desde un año antes- que comenzó a fraguarse diez años antes bajo el mandato del socialista Antonio Martínez Caler, al frente de la institución provincial, el único requisito que incluía el acuerdo era que la Orden procediera a la rehabilitación del inmueble, Bien de Interés de Cultural, desde 1980, así como el mantenimiento del uso asistencial y cultural, con la apertura al público de las zonas de mayor interés.
La falta de fondos para la rehabilitación por parte de la Diputación fue lo que impulsó a Martínez Caler a emprender la cesión del inmueble renacentista. Pero la Orden, desde entonces, tan solo ha acometido tímidas reformas, también por falta de fondos. Ahora, dispone de ellos gracias a las donaciones recibidas que permitirán afrontar las complejas obras, presupuestadas inicialmente en 15 millones de euros
La Orden premió a Sebastián Pérez por la cesión gratuita con la Granada de Oro.
Precisamente, la falta de fondos para la rehabilitación por parte de la Diputación fue lo que impulsó a Martínez Caler a emprender la cesión del inmueble renacentista. Pero la Orden, desde entonces, tan solo ha acometido tímidas reformas, también por falta de fondos. Ahora, dispone de ellos gracias a las donaciones recibidas que permitirán afrontar las complejas obras, presupuestadas inicialmente en 15 millones de euros.
Según la Orden, el objetivo principal “no es solo restaurar un edificio en el sentido material del proyecto, a pesar del valor histórico y artístico que posee. Nuestro principal deseo con la restauración del Hospital San Juan de Dios es también devolverle a la ciudadanía algo que forma parte de su historia porque gracias a ellos se construyó y pudo darse desde la Orden tanto servicio a los que lo necesitaban. Hoy, en 2019, queremos seguir con esa labor tomando como referencia el simbolismo que tiene para abrir este edificio a los ciudadanos de Granada y continuar con nuestra misión asistencial al servicio de los que lo necesitan”.
La Orden defiende que en estos 10 años ha llevado a cabo diversas acciones en el edificio como la construcción de nueva red de pluviales, el apuntalamiento y protección de la baranda del primer claustro, la consolidación de pinturas murales, actuaciones en cubiertas y fachadas, la retirada y limpieza de cuadros del primer patio, limpieza y labores de conservación de tejados, la ejecución de la primera fase del Plan Director con la restauración del tercer patio, la intervención de limpieza y reparación de la fachada de la Basílica y la de aleros y cubiertas del Hospital San Juan de Dios, entre otras.
Uso asistencial y cultural
Así que tras las actuaciones de mantenimiento y conservación del edificio, ahora la Orden Hospitalaria San Juan de Dios afronta el inicio de la restauración completa del hospital.
Un proyecto que comenzará con la primera crujía que se corresponde con la fachada, que quieren devolver a su estado original, y que es la parte de mayor impacto visual del edificio.
La primera crujía alberga un espacio determinante de la configuración del hospital renacentista, como es la capilla. Con las reformas practicadas a mediados del siglo XVIII y la construcción de la Basílica, la capilla fue suprimida convirtiéndose este lugar en el nuevo acceso al edificio (a través de la portada de la primitiva capilla).
La puesta en valor de este espacio se plantea desde la perspectiva de un uso estrictamente cultural, conservando el zaguán de acceso al edificio, como entrada principal del mismo. El proyecto reconoce parte de la compartimentación realizada en época barroca, como un testimonio fundamental de la historia y de la evolución del edificio, suprimiendo otros añadidos, con el fin de descubrir la presencia oculta de la capilla original
La nave fue compartimentada, tanto vertical como horizontalmente, dando lugar a nuevas estancias hospitalarias, pero se conservaron elementos de gran importancia, como son el artesonado del bajo coro, la portada de acceso, la armadura mudéjar que cubría la nave y algunos restos de las pinturas murales originales.
La puesta en valor de este espacio se plantea desde la perspectiva de un uso estrictamente cultural, conservando el zaguán de acceso al edificio, como entrada principal del mismo. El proyecto reconoce parte de la compartimentación realizada en época barroca, como un testimonio fundamental de la historia y de la evolución del edificio, suprimiendo otros añadidos, con el fin de descubrir la presencia oculta de la capilla original.
Esta zona es la más deteriorada, como en febrero de 2018 denunció Equo -SOS por el Hospital de San Juan de Dios-.
Durante cinco siglos, los hermanos de la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios regentaron este hospital impulsado por su fundador, y ubicado en un edificio renacentista, que se reformó y amplió en los siglos XVII y XVIII, junto a la Basílica del Santo, habiendo dado en sus dependencias en los últimos años el Servicio Andaluz de Salud prestaciones como las relativas a las infecciones de transmisión sexual.