IU acusa al Ayuntamiento de poner en riesgo el patrimonio y la seguridad ciudadana con el proyecto fotovoltaico de El Fargue

Izquierda Unida ha mostrado su respaldo a las alegaciones presentadas por la Asociación de Vecinos de El Fargue, particulares y Ecologistas en Acción frente al proyecto de instalación de tres plantas de placas fotovoltaicas en esta barriada granadina. La formación mantuvo en la jornada de ayer una reunión con la directiva de la asociación vecinal para abordar esta problemática y coordinar esfuerzos ante lo que consideran una amenaza tanto medioambiental como patrimonial para la ciudad.
Actualmente, el proyecto se encuentra en fase de alegaciones, tras haber obtenido calificación ambiental favorable por el Ayuntamiento de Granada. Al no superar las diez hectáreas, la competencia ambiental recae en el consistorio granadino, aunque la autorización definitiva de explotación corresponde ahora a la Consejería de Economía, Hacienda y Fondos Europeos de la Junta de Andalucía.
Izquierda Unida ha insistido en la necesidad de estudiar con detalle todas las alegaciones presentadas. “Estamos ante un proyecto que puede suponer un grave impacto medioambiental y cultural. No solo se pone en riesgo el entorno natural del barranco del Sacromonte o el parque periurbano del Llano de la Perdiz, sino que además afecta al entorno de la Alhambra, que forma parte del Patrimonio Mundial protegido por la UNESCO, título que puede peligrar con el impacto de estas plantas”, ha afirmado Mari Carmen Pérez, coordinadora provincial y diputada de IU.
Posibles inundaciones en el Sacromonte
La formación ha advertido de que la implantación de estas plantas supondría, entre otras cosas, la tala de olivos centenarios, con las consecuencias medioambientales que ello conlleva. “No queremos ser alarmistas, pero las escorrentías generadas tras la instalación podrían provocar inundaciones en el Sacromonte, un riesgo que ya ha sido advertido por informes técnicos sobre el yacimiento arqueológico y por catedráticos de Historia del arte de la UGR sobre el impacto en el patrimonio cultural”, ha añadido Pérez.
Desde Izquierda Unida también se ha denunciado la falta de transparencia con la que, a su juicio, está actuando el Ayuntamiento de Granada. Según la organización, no se ha ofrecido información clara ni se ha contado con la participación de los vecinos en un asunto de gran trascendencia para el futuro de la ciudad. “Lo más preocupante es la opacidad del Ayuntamiento y la falta de planificación entre administraciones. Se está actuando sin orden, sin diálogo con la ciudadanía y sin evaluar adecuadamente los efectos negativos de este tipo de proyectos”, ha señalado la coordinadora provincial.
IU ha anunciado que solicitará reuniones con los delegados territoriales de Industria y Cultura de la Junta de Andalucía para exigir que se estudien minuciosamente todas las alegaciones presentadas. La organización reclama que se priorice la protección del entorno y se escuche a los vecinos y colectivos sociales que llevan tiempo advirtiendo del riesgo que implica la ejecución de este proyecto. “La transición energética debe hacerse con sentido común y sin destruir nuestro patrimonio natural y cultural.”, ha concluido Pérez.