Comienzan los trabajos de restauración de las antiguas zonas mineras en el Parque Natural Sierra de Baza
La Junta inició en julio las obras de recuperación de las zonas degradadas por la minería en el Parque Natural Sierra de Baza, proyecto del que ya se ha ejecutado un 20 por ciento y cuyos trabajos iniciales han consistido en movimientos de tierras, necesarios para eliminar el material rocoso de mayor impacto paisajístico.
Estas labores han permitido a su vez eliminar el peligro que supone la presencia de algunos frentes de escombreras y hoyos de bocaminas, con fuertes caídas cercanas a zonas de uso público.
Así lo han comprobado este miércoles los delegados de Conocimiento y Empleo, Juan José Martín Arcos, y Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, Inmaculada Oria, durante una visita a la zona.
El proyecto, que cuenta con una inversión de 1.047.000 euros, tiene un periodo de ejecución de 15 meses y su principal objetivo es la reparación ambiental, paisajística y etnográfica de una zona marcada por la intensa actividad minera de los años 60 y 70. La disponibilidad de fondos Feder permite también cumplir con la misión dictada por la Unión Europea de restaurar las minas abandonadas y los depósitos de residuos mineros.
Las minas objeto del proyecto son los complejos de las Minas del Carmen, Minas de la Cruz, el denominado Filón Violeta y sus alrededores.
Todas estas zonas están ubicadas en terrenos públicos de las localidades de Baza y Gor, montes que se encuentran en la actualidad consorciados con la Junta de Andalucía y localizados en el interior del Parque Natural Sierra de Baza en zonas de máxima protección del espacio natural, correspondiente a altas cumbres con pinares autóctonos y prados de alta montaña mediterráneos.
Según la delegada de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, este proyecto no sólo cuenta entre sus objetivos el de restaurar el medio natural, sino también contribuir a la recuperación de los emplazamientos mineros más significativos, potenciar el patrimonio cultural e histórico de las áreas afectadas y proteger las antiguas instalaciones mineras.
Restauración del paisaje
Por un lado, se pretende completar una restauración paisajística con los movimientos de tierra necesarios para eliminar los cúmulos de materiales rocosos de mayor impacto, sirviendo este material como relleno de los huecos y hoyos producidos por la antigua actividad minera, a la vez que se estabilizan los taludes que integran los frentes de cantera.
Por otro, la línea final de intervención del proyecto consiste en acercar estas zonas a través de itinerarios interpretativos que sirvan para divulgar los valores etnográficos de estas antiguas minas.
Los yacimientos se han seleccionado de tal manera que abarquen una superficie variada tanto en el paisaje, como en los tipos de prácticas mineras que se llevaron a cabo en el lugar.
Para ello, y como actuaciones más destacadas previstas en el proyecto, se encuentran la restauración del malacate o antiguo montacargas de la Mina de la Cruz y los cargaderos con los raíles y la vagoneta que transportaba hasta él los materiales.
En la Mina del Carmen se recuperará el muro cargadero y se documentará con un testigo y señalización informativa la caseta que albergó las instalaciones de control de la explotación, todo ello acompañado por una señalización interpretativa que hará del entorno de Santa Bárbara un nuevo recurso para el ecoturismo, reconocido éste como un sector estratégico para Andalucía.