La Junta declara oficialmente la existencia en la Costa de la plaga del escarabajo que afecta al árbol de aguacate
Aguacates. pixabay
La Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural ha declarado oficialmente la existencia de la plaga del escarabajo 'Euwallacea fornicatus' en la comunidad andaluza tras confirmar su presencia en varias fincas de aguacates de Motril, siendo este árbol especialmente sensible a los efectos dañinos de este pequeño insecto y el hongo que lleva asociado.
Si no se toman medidas esta enfermedad provoca la muerte del árbol
Conocido coloquialmente como barrenillo del té, este diminuto escarabajo originario del Sudeste de Asia destaca sobre todo porque va asociado al hongo de la marchitez del aguacate y por lo tanto se comporta como un vector de transmisión. Al final, si no se toman medidas esta enfermedad provoca la muerte del árbol.
La Junta ha resuelto declarar oficialmente la existencia de esta plaga después de que ya el pasado agosto se notificara al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación su presencia en el municipio de Motril, tras la confirmación que de ello hizo el Laboratorio Nacional de Referencia para la identificación de nematodos y artrópodos de interés agrícola y forestal. Todo ello, en aplicación de la Ley de Sanidad Vegetal, "al suponer la primera detección de este organismo nocivo en nuestro país", según se detalla en la resolución publicada este martes en el BOJA y consultada por Europa Press. La medida llega tres meses después de que comenzara a detectarse y se celebraran las primeras reuniones para informar a los agricultores.
Con estos antecedentes, la Junta ha resuelto declarar oficialmente la existencia de esta plaga, fija como "zona infestada" varias fincas de Motril y establece para ellas una serie de medidas fitosanitarias "obligatorias" para combatirla. Y es que la presencia de esta especie ya supone un problema serio para la industria del aguacate en otras parte del mundo.
Así las cosas, los productores de las explotaciones agrícolas que se encuentren en las zonas demarcadas deberán realizar tratamientos fitosanitarios y prospecciones exhaustivas al objeto de determinar la presencia de este organismo nocivo. En concreto, el autocontrol de la plaga en las instalaciones tendrá una frecuencia como mínimo mensual. Además quienes sospechen que pueden tenerla o constaten su presencia deberán comunicarlo a la Delegación Territorial de Agricultura.
En todos los árboles de las zonas infectadas en los que se sospeche o constate la presencia de la plaga en una parte de su copa que corresponda a una rama primaria (la que surge directamente del tronco o del cuello a ras de suelo) se podará "inmediatamente" y si están afectados en una parte mayor, serán arrancados y destruidos antes de 20 días
En todos los árboles de las zonas infectadas en los que se sospeche o constate la presencia de la plaga en una parte de su copa que corresponda a una rama primaria (la que surge directamente del tronco o del cuello a ras de suelo) se podará "inmediatamente". Cuando afecte a ramas no primarias se realizarán podas selectivas.
La Junta precisa que todos aquellos árboles afectados en una parte mayor de su copa serán arrancados y destruidos antes de 20 días contados a partir de la notificación de la resolución que haga la Delegación Territorial para que no haya riesgo de dispersión de la plaga.
Junto a ello, se establece que los restos vegetales afectados por la plaga se destruirán de forma inmediata, preferentemente se triturarán, y a su vez serán objeto de una aplicación insecticida. Asimismo, no se compartirán vehículos, medios de transporte, cajas y contenedores de fruta, ni otros elementos propios de la actividad agrícola y se procederá a la desinfección adecuada de todas las herramientas empleadas.
Desde la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) han señalado a Europa Press que actualmente esta plaga "no es una cosa generalizada" en toda la Costa Tropical de Granada sino algo "puntual" en algunas fincas de Motril sobre las que "se están poniendo los medios" para combatirla.
"Hay que estudiar la especie, conocer los tratamientos más adecuados; igual que se hace con otras plagas que llegan de otras partes porque con la globalización es casi imposible controlar todo lo que viene", relata a Europa Press el secretario provincial de COAG en Granada, Miguel Monferrer.
Junto a ello, apela a la "responsabilidad" de los productores para informar si tienen sospechas de la existencia de la plaga en algunas de sus explotaciones para "trabajar conjuntamente y buscar tratamientos eficaces" que ayuden a erradicarla. Otros productos subtropicales sensibles a esta plaga son el mango y el chirimoyo, aunque en la costa granadina afecta por el momento al aguacate.