Cruz Roja: estamos en las grandes catástrofes y en las del día a día

El subinspector de la Policía Local detenido por presunto quebrantamiento de la orden de alejamiento alega que no hubo intencionalidad

Ciudadanía - IndeGranada - Jueves, 9 de Octubre de 2025
El Juzgado de Violencia sobre la Mujer 2 de Granada ha acordado la puesta en libertad provisional del mando y ha encargado un informe al Centro de Control de las Medidas Telemáticas de Alejamiento con el fin de aclarar si el acercamiento fue accidental o intencionado.

El Juzgado de Violencia Sobre la Mujer número 2 de Granada, que se encuentra en funciones de juzgado de guardia, ha acordado este jueves la puesta en libertad provisional del mando de la Policía Local de Granada detenido por la presunta comisión de un delito de quebrantamiento de medida de alejamiento respecto de su esposa dictada por orden judicial. El Juzgado ha remitido un oficio al Centro de Control de Medidas Telemáticas de Alejamiento, el conocido como Centro Cometa, para que amplíe la información sobre la ubicación de los dispositivos de alerta y las conversaciones telefónicas mantenidas con las dos partes. 

Según el TSJA, el Juzgado ha incoado nuevas diligencias previas sobre este posible nuevo quebrantamiento cometido por el agente policial. Con el fin de aclarar si el acercamiento ocurrido se produjo de forma accidental o de manera intencionada, -lo que supondría una infracción legal-, se ha solicitado al Centro Cometa que informe detalladamente sobre el posicionamiento de los dispositivos de las dos partes el pasado día 6 de octubre. El contacto tuvo lugar fuera del lugar de residencia de la denunciante.

En su declaración el agente detenido ofreció las explicaciones que consideró oportunas para desmentir la intencionalidad del acercamiento.

Quebrantamiento anterior

El pasado día 15 de mayo del año 2025, fue el Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 1 de Granada el que tomó declaración a este mando policial por la presunta comisión de un delito de quebrantamiento que se habría producido entre los meses de marzo y mayo por medio de llamadas telefónicas, -que la presunta víctima no atendió en ningún momento-, y por varias desconexiones supuestamente intencionadas del brazalete electrónico que de forma permanente está obligado a llevar el funcionario policial para impedir su acercamiento a su pareja. En este punto, el agente negó que las desconexiones fueran voluntarias y alegó que se debieron siempre a fallos de conexión del aparato.

El Juzgado número 1 incoó las correspondientes diligencias después de que el denunciado no aceptara el acuerdo de conformidad propuesto por la fiscalía y por la necesidad de seguir investigando las circunstancias y motivos por los que se produjo, presuntamente, la infracción de la medida cautelar. Mientras esto se sustancias, el Juzgado de Guardia impuso al agente la prohibición de acercarse o estar en el municipio de Armilla, lugar de residencia de la denunciante, medida cautelar que fue aceptada por todas las partes, tanto el ministerio fiscal, la acusación particular y la defensa.

El presunto caso de violencia de género que llevó a la imposición de la medida de alejamiento ahora presuntamente quebrantada está siendo juzgado desde ayer, miércoles, en el Penal número 5 de Granada.