El paro entre la población extranjera de Granada se ha duplicado en los últimos diez años, destaca UGT
La provincia de Granada cuenta con un total de 58.354 personas extranjeras, (el 6,36% de la población total), mientras que hace diez años, en 2007, había 48.986, un 19% menos, destaca UGT. Además, según el Ministerio de Empleo, hay 6.420 extranjeros en situación de desempleo en la provincia de Granada, un 7,63% del total de parados de la provincia, mientras que en 2007 había 2.987, lo que supone un ascenso del 114% en el número de parados extranjeros en Granada.
De estas 58.354 personas extranjeras, 29.081 proceden de países de la Unión Europea, 2.219 del resto de países de Europa, 13.418 de países africanos, 1.193 de América del Norte, 1.388 de Centroamérica y Caribe, 7.561 de Sudamérica, 3.415 de países asiáticos, 75 de países de Oceanía y 5 apátridas.
Rosa Mª Muñoz, secretaria de Igualdad y Mujer de UGT Granada, señala, en el Día Internacional del Migrante, este 18 de diciembre, que el destino laboral mayoritario de este colectivo sigue encontrándose en el servicio doméstico y en el sector servicios en el caso de las mujeres, mientras que los hombres se emplean en su mayoría en agricultura y servicios. Sólo un bajo porcentaje tiene algún tipo de estudios, pero se encuentran con el problema de que no son homologables, les cuesta reciclarse y apenas hay autónomos, y la brecha salarial entre hombres y mujeres es superior a la de la población española, debido sobre todo a que en el servicio doméstico se paga el mínimo.
La representante de UGT quiere recordar que la migración de hombres y mujeres, que por distintos motivos han venido a nuestro país son parte de nuestra historia y han contribuido a conformar la sociedad tal y como la conocemos. Seguimos siendo un país de recepción de migrantes, afirma la ugetista, pero es preciso también tener en cuenta que existen movimientos de ida y vuelta y es en este flujo donde es más evidente la diferencia de quienes vienen a trabajar, buscando mejores condiciones de vida (por ejemplo, Rumania y Marruecos) y quienes vienen a retirarse tras jubilarse en sus países de origen (como Alemania y Reino Unido).
La representante sindicial recuerda que la irrupción de la crisis económica, la injusta e ineficaz política de ajuste del Gobierno del PP, el endurecimiento de la política migratoria, la reducción de los presupuestos públicos dedicados a la integración y el repunte de las opiniones y actitudes xenófobos en tiempo de crisis, han contribuido a reforzar la precariedad de este colectivo y multiplicar el riesgo de exclusión social. En este sentido, la dirigente sindical ha manifestado que este colectivo ha trabajado atendiendo necesidades del mercado laboral y ha contribuido, mediante sus cotizaciones e impuestos, al mantenimiento y mejora del Estado del Bienestar.
Sin embargo, la situación jurídica de muchas personas inmigrantes está especialmente afectada por los procedimientos de renovación, arraigo y reagrupación familiar, cuyos criterios se han endurecido durante la crisis, haciendo que el acceso a derechos sociales básicos esté muy condicionado por la situación económica, ha criticado . Por eso, ugetista llama a la reflexión sobre las verdaderas causas de la migración, la suerte de los que no la padecen y la necesaria solidaridad con quienes se ven obligados a abandonar su país de origen. UGT, como sindicato de clase, defiende una política migratoria que tenga como pilar fundamental el principio de igualdad, un modelo migratorio con derechos y el tratamiento no discriminatorio de la población inmigrante que reside en nuestra provincia, ha concluido la sindicalista.