El concejal y portavoz socialista, Paco Cuenca, ha visitado la Cuesta de la Alhacaba, en el Albaicín para conocer de primera mano la situación que viven a diario los vecinos de esa zona del barrio que se enfrentan al caos de tráfico y las dificultades para caminar, "mucho más tras hacerse efectiva una acción del área de Movilidad del bipartito que ha permitido el libre aparcamiento en ese espacio", indica el PSOE en una nota de prensa. 

Cuenca, que ha mantenido un encuentro con representantes vecinales del Albaicín, ha demandado “sensibilidad del bipartito para resolver un problema que los vecinos de la Alhacaba vienen demandando y que afecta directamente a su calidad de vida. Lamentablemente, el bipartito está más preocupado de su supervivencia que del bienestar de las familias granadinas que, como sucede en el Albaicín, demandan soluciones a su equipo de gobierno sin encontrar respuestas alguna”. 

Para el portavoz del PSOE, “la zona de la Cuesta de la Alhacaba necesita un plan especial que regule el tráfico y, sobre todo el aparcamiento en un espacio que encierra mucha dificultad por su ubicación física, pero al que hay que dar un arreglo, pues estamos hablando de la obligación que tenemos todas las instituciones de hacer un Albaicín más habitable para sus vecinos si queremos que el barrio siga con vida, por eso hay que situar en el centro de todas las decisiones que se adopten a sus vecinos. En tal sentido es clave que el Ayuntamiento aborde la necesidad de permitir que los vehículos que aparcan en la Cuesta de la Alhacaba sea para los vecinos de la zona, aunque por desgracia, lo que ha hecho es todo lo contrario”. 

El socialista ha lamentado que “el equipo de gobierno bipartito haya demostrado, una vez más estar de espaldas a la realidad social de nuestra ciudad, imponiendo un sistema de aparcamiento en la Alhacaba en contra de los deseos de los colectivos vecinales que, como les estoy indicando, pasan por permitir exclusivamente estacionar sus vehículos en la zona a los residentes. La política municipal exige diálogo, exige consenso, exige respeto, y ninguna de las tres condiciones forman parte de las virtudes del bipartito de Salvador y Pérez que, como siempre demuestran que su cabeza no está precisamente en el interés general sino en mantenerse a toda costa en una Alcaldía que nadie les dio y que carece de respaldo popular, tal y como se vio el pasado día 10”.