El Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Granada ha denunciado el colapso en la gestión de los expedientes vinculados a la Zona Ora y la zona de Bajas Emisiones, procedimiento obligatorio para los granadinos y granadinas que no quieran recibir una multa por aparcar o entrar en la ciudad. La concejala del PSOE, Raquel Ruz, ha apuntado que “la desastrosa gestión de Carazo, la falta de personal y la improvisación ha provocado que el área sea incapaz de sacar adelante todos los expedientes en un tiempo prudencial, provocando que a los vecinos y vecinas de Granada cada día tengan más difícil el acceso a la bonificación de la tarifas de la Ora y zona Azul”.

“La falta de personal, la sobre carga de trabajo de los funcionarios y una desastrosa gestión están provocando que vecinos y vecinas de Granada tengan que esperar meses y meses para que se les autorice el bono residente o se informe a la empresa de la Ora la condición de residente, trámite necesario para que no  imponga una multa por estacionar en tu calle o en los alrededores”

“La falta de personal, la sobre carga de trabajo de los funcionarios y una desastrosa gestión están provocando que vecinos y vecinas de Granada tengan que esperar meses y meses para que se les autorice el bono residente o se informe a la empresa de la Ora la condición de residente, trámite necesario para que no  imponga una multa por estacionar en tu calle o en los alrededores”, ha explicado la edil, quien ha recordado que tras la imposición por parte del PP de las nuevas 1.500 plazas de aparcamiento de pago, el volumen de peticiones se ha disparado “teniendo que esperar varios meses para recibir la contestación del Ayuntamiento y la autorización para acogerse a las tarifas de residente”.

Ruz ha recordado que la condición de residente se tiene que solicitar todos los años “con fecha 1 de enero. No tener la autorización renovada supone ser sancionado como nos han denunciado muchos vecinos y vecinas de Granada atrapados por la burocracia y el colapso de un área que ahora está afrontando también las reclamaciones por la Zona de Bajas Emisiones, impuesta por Carazo, y que supone la prohibición de entrada a Granada de más de 6.000 vehículos procedentes del área metropolitana a partir de abril”.

“No se entiende que un vecino o vecina tenga que esperar meses y meses a que le autoricen a aparcar en su calle. No tiene sentido y solo denota que este gobierno sólo trabaja para imponer sanciones y no para gestionar el día a día de los granadinos y granadinas”, ha apuntado la edil, quien ha destacado que, “si mal lo tiene los empadronados en Granada, peor lo tienen nuestros vecinos del área metropolitana, quienes en menos de un mes van a sufrir las consecuencias de que les impidan entrar en la capital bajo el paraguas de las Zona de Bajas Emisiones, que es más Zona de Multa Segura (ZMS), ya que las emisiones y la calidad de aire seguirá siendo las mismas ya que no hay ningún estudio que acredite que la medida del PP y de la alcaldesa Carazo beneficiará y reducirá la contaminación en Granada”.